CRÓNICA: El sismo que aterrorizó a Acapulco
Acapulco, Gro.- Eran las 8:47 de la noche cuando un terremoto de magnitud 7.1 sacudió el puerto de Acapulco, dejando un muerto e incontables daños materiales.
Los acapulqueños salían de sus trabajos, preparaban su cena o simplemente pasaban una noche como cualquier otra cuando el sismo los sorprendió.
Descalzos y con lo que tenían a la mano salieron de sus casas en medio del movimiento telúrico. Algunas personas ni siquiera alcanzaron a llegar a la puerta cuando se cortó la energía eléctrica.
Entre sollozos y oraciones, las familias se abrazaron. Vecinos se reunieron y desconocidos se convirtieron en amigos que se apoyaron en el momento de desesperación.
A oscuras y con miedo, los acapulqueños pasaron 150 segundos de terror.
La tierra aún se movía cuando desesperados intentaban comunicarse con sus familiares, lo que resultó en vano pues las líneas telefónicas se cayeron.
Terminó de temblar. Ellos seguían abrazados aún sin poder creer lo que estaba pasando cuando la tierra volvió a moverse,
Acapulco no durmió
Las personas seguían alteradas en Acapulco por el fuerte sismo, cuando una réplica de magnitud 5.2 volvió a sacudir la tierra.
El miedo invadió a los acapulqueños, algunos lograron comunicarse por fin con sus seres queridos, mientras que otros seguían intentándolo.
Y así, los movimientos telúricos no pararon en el puerto, el movimiento constante de la tierra no dejó que las personas entrarán a sus hogares para verificar si se encontraban dañados.
Vecinos se reunieron en las calles o canchas, pues las réplicas registradas eran de magnitud 4 y 5, lo que les arrebató la tranquilidad durante toda la madrugada.
Muchos prefirieron dormir en la calle. Sacaron sus sábanas, colchonetas o lo que fuera que les ayudara a poder descansar pero al mismo tiempo estaban alertas, pues las réplicas no permitieron que nadie durmiera esa noche.
La mayoría de las viviendas no tenían energía eléctrica, por lo que permanecieron en la oscuridad.
Hasta las 5 de la tarde del siguiente día, ya se habían registrado 259 réplicas del terremoto.
Acapulco nunca había sufrido un sismo tan fuerte que provocará tantos daños en edificios, casas, negocios y hoteles.
Se registraron caídas de losas y techos de varios establecimientos, así como postes de luz, bardas y grandes piedras.
El acceso a los famosos Maxitunel y Macrotúnel se suspendió a la espera de que Protección Civil realice la supervisión correspondiente.
Sin duda este 7 de septiembre quedará marcado en la memoria de los acapulqueños.
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