Una fotografía publicada en Twitter revela mucho de lo que se está formando al interior de la LXI Legislatura del Congreso del estado.
En el retrato posteo en la red social del microblogging, las diputadas Mónica Silva y Nora Merino posan hombro a hombro previo al inicio de la sesión de la Comisión de Igualdad de Género, que preside la expresidenta del Legislativo local.
El mensaje que acompañó a la estampa que se difundió en diferentes redes sociales fue la siguiente: “Ya estamos listas para dar inicio a la Sesión de la Comisión de Igualdad de Género en el Congreso del Estado. ¡Es #TiempoDeLasMujeres.
Esta imagen y el texto que la acompañó, aunque no parezca, dicen mucho.
Y es que, Escamilla Merino y Silva Ruiz son dos de las diputadas que más destacan entre todas las mujeres que integran el pleno del Congreso de Puebla y quienes tienen reales y fuertes proyecciones para los comicios del 2024.
El género juega a favor de las legisladores emanadas del Partido del Trabajo, pues los acuerdos de la alianza Juntos Haremos Historia (Morena-PT-PVEM) establecen que si la candidatura el gobierno del estado recae en un hombre, en automática la postulación a la presidencia municipal de la capital está reservada para una mujer.
Aquí Nora Merino y Mónica Silva aumentan sus posibilidades en la mesa política de negociaciones.
A ambas les favorece su imagen joven y fresca, sus capacidades electorales que quedaron demostradas en la elecciones intermedias del 2021 a pesar de la catástrofe en las que se convirtió la campaña de Morena en la capital y la zona metropolitana por el repudió que generó la imagen de Claudia Rivera, así como su trabajo destacado a favor de la igualdad de género.
Justo el último factor es el que están caminando ya tanto Nora Merino como Mónica Silva: rescatar el verdadero feminismo de Puebla, el cual fue secuestrado por Rivera Vivanco para abanderar una causa vacía y llena de simulación con el único objetivo de encontrar ahí réditos electorales que nunca llegaron.
La ex alcaldesa de Puebla y candidata fallida reeleccionista solo se aprovechó del Movimiento de Pañuelos Verdes y de diferentes Colectivas para mostrar una imagen que jamás pudo consolidar como aliada de la causa, ya que en los hechos, la morenista fue una agresora de su mismo género, además de encubrir a una serie de acosadores y violentadores que ocuparon cargos de primer nivel en el Ayuntamiento capitalino.
Merino y Silva van por el rescate del verdadero feminismo en Puebla.
De hecho, ambas diputadas ya signaron un pacto para impulsar de manera conjunta la despenalización del aborto en el estado para evitar que este tema se utilice de manera política y electoral como lo están intentando hacer algunos mezquinos como el G5 antibarbosista, que comanda Daniela Mier, la hija de Ignacio Mier y coordinadora de facto de la bancada del PAN.
Y es que, el pasado viernes mientras todos los focos estaban puestos en las comparecencias por la glosa del tercer informe de gobierno de Miguel Barbosa, Daniela Mier, Carlos Evangelista, Iván Herrera y Eliana Cervantes, presentaron la primera iniciativa de la LXI Legislatura para despenalizar el aborto hasta las 12 semanas de gestación con el mezquino objetivo de que sean ellos los que se lleven los aplausos y la medalla de lograr que en Puebla el aborto sea legal y gratuito.
Oportunismo puro.
No está demás mencionar que ninguno de los cuatro legisladores, quienes destacan por su oportunismo, se habían destacado en el pasado por luchar por esta causa y sumarse a otros actores políticos que sí han luchado porque esta iniciativa sea al fin aprobada en el Congreso del estado.
No les caería mal a Daniela Mier y a su grupo de obnubilados volteen a ver el caso de Claudia Rivera, quien abanderó un “fakemismo” que la terminó por hundirla frente al electorado, frente al movimiento que lucha por la igualdad de género y frente a todos los poblanos.
Por esto es que Mónica Silva y Nora Merino buscan que la iniciativa de la despenalización del aborto deje de ser vista como un botín político y se aborde con plena conciencia, seriedad y con todas las opiniones y visiones que el tema lo amerita.
Aunque la iniciativa proabortista es un tema que no se vislumbra entre las prioridades del debate parlamentario, sí resulta alentador que dos mujeres congruentes y capaces estén abanderado esta causa en la que muchas colectivas tienen sus esperanzas puestas.
Pero, la agenda ya está marcada.
En el tablero geopolítico del 2024 cada quien mueves su piezas.
La apuesta está hecha entre estas dos diputadas petista que buscan rescatar al verdadero feminismo en Puebla.
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