La votación del próximo titular de la Auditoría Superior del Estado en el seno del Congreso del estado será la primera prueba de fuego que sorteará Sergio Salomón Céspedes como presidentes del Legislativo local.
La unción de Amanda Gómez como auditora del estado probará las suertes de gran cabildero de Céspedes Peregrina, quien hasta el momento ha demostrado su lealtad y confianza hacia el barbosismo como una de las piezas emergentes en el tablero de la geopolítica poblana.
Los buenos oficios del exalcalde de Tepeaca son más que probados.
Hasta esta noche, el coordinador de la bancada de Morena contaba con los votos necesarios para la designación de Gómez Nava al frente de la ASE, aunque este acuerdo no saldrá por unanimidad, como era previsible.
El diputado morenista tenía amarrados 28 votos: 13 de Morena, cinco del PT, uno del Verde, siete del PRI, uno de Movimiento Ciudadano y el del PSI, con lo que se lograría la mayoría calificada necesario para sacar adelante la elección de Amanda Gómez.
Un voto más que con los que electo el impresentable Francisco Romero en el 2019.
En abstención o en contra votarán los nueve integrantes del grupo parlamentario del PAN aunque se prevé que Eduardo Alcántara podría respaldar a la carta barbosista para la Auditoría Superior.
Una postura que habrá que seguir de cerca es la que asuma el marginal grupo disidente de Morena, conocido como G5 y que integran Daniela Mier Bañuelos, Carlos Evangelista Aniceto, Iván Herrera Villagómez y Eliana Angélica Cervantes González, pues el sentido de su votación podrá determinar la suerte de Ignacio Mier y de su socio Arturo Rueda, quienes están acusados y denunciados penalmente por lavado de dinero y evasión fiscal.
¿La hija del inútil Ignacio Mier entenderá que la situación apremia y que no es momento para sus conspiraciones baratas?
En las horas más bajas, las bravatas salen sobrando.
La sesión de este jueves no será para nada tersa y también se convertirá en una nueva disputa política, ya que saldrá a relucir el escándalo del anterior auditor Francisco Romero, hoy preso por los delitos de blanqueo de divisas y también involucrado en la “Operación Angelópolis”, en la que están implicados Mier Velazco y Rueda Sánchez de la Vega.
Los principales interesados en manchar la llegada de Amanda Gómez a la ASE, sin lugar a duda, serán los diputados afines a Genoveva Huerta, quien ya se rindió ante Eduardo Rivera, una vez que el TEPJF dejó firme a Augusta Díaz de Rivera y a Marcos Castro al frente del Comité Directivo Estatal del PAN y que su aliado Nachito Mier está en una imparable caída libre.
Todo indica que la unción de la próxima auditora caminará en los términos esperados para Sergio Salomón Céspedes, quien buscará que la imagen de Gómez Nava sea lo menos lastimada posible tras una desastrosa comparecencia, que incluso se convirtió en noticia nacional por sus pésimas respuestas vertidas durante su entrevista con la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del estado.
El gran reto para Céspedes Peregrina será el de proteger a Amanda Gómez, quien tendrá que mostrar de manera inmediata sus capacidades y aptitudes por las que llegó al cargo de auditora Superior de Estado.
Y es que, la futura auditora no solo tendrá el reto de desmanchar a la ASE tras el corrupto paso de Romero Serrano, sino que deberá, sí o sí, presentar las denuncias penales correspondientes en contra de todos los colaboradores cercanos que se prestaron como cómplices de todos los delitos cometidos por el hoy detenido.
Una validación a su cargo de forma expedita.
El pronostico indica que Sergio Salomón Céspedes logrará pasar sin tiznarse de manera considerable su primera prueba de fuego.
Una palomita que mucho suma para lo que se viene en el futuro cercano.
Sin unanimidad, pero con mayoría.
Misión cumplida.
Parece que es un buen trato.
Veremos.
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