Pastores de Puebla se lanzaron en contra del proyecto de dictamen para castigar las terapias de conversión en el estado con hasta tres años de prisión al considerarla “un atentado” contra su libertad de culto.
“Pidieron ayuda, fueron desengañados, se les quitó el engaño que traían en su idea”
En conferencia de prensa, pastores miembros del Consejo Poblano de Ministros pidieron al Congreso del Estado reconsiderar en el dictamen que aprobó la Comisión de Procuración y Administración de Justicia.
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El vocero del consejo, Julio Flores, manifestó que la iniciativa busca clasificar la consejería religiosa como “una de las prácticas denominadas ECOSIG (esfuerzos para corregir la orientación sexual y la identidad de género)”, imponiendo castigos con penas de prisión de 1 a 3 años.
Rechazó que en los servicios de consejería religiosa se utilicen técnicas de violencia, tortura psicológica, privación ilegal de la libertad, terapias de electrochoques, o cualquier otro método violento.
“Nos parece incomprensible que quieran comparar estas prácticas violentas que condenamos, con un consejo respetuoso, sin violencia a una persona que voluntariamente nos lo suplican”.
El presidente del consejo, Alejandro del Rey, aseveró que las consejerías religiosas que ofrecen están sustentadas por estudios científicos para “hacer la voluntad de Dios”.
Enfatizó que el dictamen criminaliza a los padres, consejeros espirituales, pastores, sacerdotes o cualquier persona que busque ayudar para «afirmar su identidad».
«Este dictamen pretende quitarnos el derecho a enseñarles científicamente y espiritualmente a nuestros hijos que Dios los hizo perfectos, que son una obra divina y que la ciencia lo comprueba, que el testigo legal de muchos lo confirman, y que toda la creación lo aprueba»
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