Nadie entre nosotros pudo imaginar el desenlace de la generación política que fue marcada por la elección del 2010 en Puebla.
Esa generación que pudo ser y no fue.
La alternancia fallida y dos proyectos presidenciales catastróficos.
La maldición de Casa Puebla.
(El periodista Mario Alberto Mejía escribió un título de los secreto que guardaban las paredes de la ex sede del gobierno del estado llamado “Miedo y Asco en Casa Puebla).
Rafael Moreno Valle y su esposa Martha Erika Alonso, ambos exgobernadores del estado, murieron en un trágico accidente el 24 de diciembre del 2018.
Mario Marín, luego de 16 años de su escándalo con Lydia Cacho, terminó encarcelado en Quintana Roo tras demostrarse la tortura que ordenó en contra de la periodista y su arbitraria aprehensión acordada con el empresario textilero Kamel Nacif.
Eukid Castañón, Valentín Meneses y Alfredo Arango perdieron la libertad en su momento por diferentes actos de corrupción a su paso por el sexenio marinista y morenovallista.
Javier García Ramírez, Adolfo Karam y Tony Gali prófugos de la justicia y sin poder poner pie en territorio poblano ante las ordenes de aprehensiones obsequiadas en su contra.
La detención de Javier López Zavala es el gran final para esta generación de políticos que ostentaron el poder, abusaron de él e hicieron de la perversidad un modo de vida con el que fueron capaces de cometer cualquier tipo de atrocidades como el feminicidio de la abogada y la activista Cecilia Monzón.
Aunque esta clase de hombres de poder se extingue a diario, existen algunos perfiles que aún buscan sobrevivir y colocarse en algún cargo de elección popular para seguir viviendo del erario, pues es la única forma que conocen para salir adelante, aunque sea con el pago de nuestros impuestos.
En este escenario se encuentra Alejandro Armenta, quien ha saltado de puesto en puesto y de partido en partido desde hace más de dos décadas con tal de seguir sangrando las arcas públicas y no perder el poco poder que aún tiene.
De hecho, Armenta Mier es el principal damnificado de la aprehensión de su compadre Javier López Zavala.
El ahora preso en el penal de San Pedro Cholula venía trabajando de la mano con el ahijado del góber precioso en su decadente precampaña en el interior del estado acercándole a la obsoleta estructura priista, que aún se mantenía fiel a los últimos dos grandes marinistas que encabezan al grupo que dejó huérfano el exmandatario poblano.
En esta obsesión por convertirse en el abanderado de Morena en el 2024, López Zavala era lo más cercano a un coordinador de campaña de Alejandro Armenta, quien ya suma a otro colaborador cercano encarcelado tras la detención de la #NarcoBarbie Marina Martínez Ruiz, su gran operadora juvenil aprehendida por los delitos de privación ilegal de la libertad, asociación delictuosa y portación ilegal de armas de uso exclusivo del ejército.
Sí, Armenta Mier, el otro sobrino perverso, es el gran daño colateral de López Zavala.
La relación de Alejandro con “Zavalita” nació en el la lejana LV Legislatura del Congreso del estado, la cual fue la segunda del sexenio de Melquiades Morales y en la que se encontraban perfiles como Víctor Manuel Giorgana, a la sazón coordinador de la fracción priista y por ende presidente del Legislativo, Víctor Hugo Islas (también detenido en el Cereso de Cholula), José Luis Márquez, Humberto Vázquez Arroyo, Juan Manuel Vega Rayet, entre otros.
Y es que, dicho pleno estaba dividido entre los “melquiadistas”, que eran el grupo predominante”, y los “marinistas”, el cual eran los out siders y encabezados por López Zavala.
Luego de retar a golpes a Giorgana, Armenta Mier, irascible y irracional como es, buscó asilo en Javier López para sobrevivir el resto de la Legislatura y ahí fue cuando ambos se volvieron cercanos a tal grado de que el hoy senador le debió al detenido sus nombramientos como director del SEDIF y secretario de Desarrollo Social.
No solo, Armenta se convirtió en el coordinador de la campaña de López Zavala en los ya mencionados comicios del 2010.
Qué bonitos amigos: aquí Javier López Zavala y El Soldadote @armentaconmigo.
— Gerardo Ruiz (@GerardoRuizInc) June 7, 2022
Por cierto, el Ahijado Mario Marín ya pedido a su “gran operador” en el interior del estado: pic.twitter.com/FzxRaK9Ncp
Ahí inició la leyenda del Soldadote de las Derrotas como un perdedor nato.
También, López Zavala fue de los primeros en ser traicionados por Alejandro Armenta, quien sigue sumando más ingratitudes a su larga lista.
¿Armenta Mier tendrá el valor de ir a visitar a Javier López Zavala a la cárcel?
El marinismo en su esencia pura.
Qué final, señores.