La entrega de patrullas y la firma de los convenios con estados limítrofes y del Fondo de Aportaciones para la Seguridad, que congregó en Puebla capital a nueve gobernadores –dos de ellos del PAN– fue solo el pretexto.
El encuentro que tuvo como sede a la Angelópolis y del que el gobernador Sergio Salomón Céspedes en realidad fue para presentar ante todo el país la fuerza que Claudia Sheinbaum, la virtual precandidata de Morena a la presidencia de la República en el 2024, tiene entre sus pares.
Desde el segundo semestre del 2021, Sheinbaum Pardo viene trabajando un pacto con los mandatarios emanados de Morena que controlan casi las tres cuartas partes del territorio nacional.
La alianza entre los gobernadores de Morena y la jefa del gobierno de la Ciudad de México no es menor.
Esta es temible y luce imparable.
Claudia Sheinbaum, a diferencias de los otros tres aspirantes del Movimiento lopezobradorista, Marcelo Ebrard, Adán Augusto López y Ricardo Monreal, ha venido tejiendo fino a lo largo del territorio nacional y amarrando a casi todos los gobernadores con los que cuenta el partido marrón.
Puebla, con Miguel Barbosa aún en vida, fue de las primeras entidades en sumarse de manera pública al gobierno de la jefa de la CDMX.
Ahora, Céspedes Peregrina ha logrado afianzar y darle continuidad a ese proyecto político y a esa ruta trazada por Barbosa Huerta.
Los lazos entre Claudia y Sergio Salomón están a la vista de todos.
En población, los 20 estados gobernados por el lopezobradorismo se traducen en 68.3 millones de personas, más de la mitad de los mexicanos en todo el país (126.01 millones), de acuerdo con el censo 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía.
La cifra es demoledora.
Este 2023, el Movimiento Regeneración Nacional tiene grandes posibilidades de sumar a otro estado, el más importe en el mapa geopolítico nacional, si gana los comicios en el Estado de México, en donde Delfina Gómez parte con una ventaja de doble digito, al decir de la encuesta de este mes publicada por el Periódico Reforma.
Los conocedores de las elecciones señalan que para ganar las elecciones presidenciales son imprescindibles ganar o no perder por una fuerte desventaja Puebla, el Estado de México, la Ciudad de México y Oaxaca.
De estos cuatro, Morena domina tres y el PRI solo uno.
Además de control el recién renovado Consejo Político Nacional de Morena, Claudia Sheinbaum es la líder moral de los 20 gobernadores del partido marrón y así se ha venido manifestando en diferentes actos públicos partidistas y encuentros oficiales en otras entidades como la que se vivió ayer en la capital poblana.
El control total del partido se le entregará en septiembre cuando se renueve la dirigencia nacional morenista.
Para nadie es un secreto que la mayoría del morenismo poblano está apostado por la jefa de la Ciudad de México y que el gobernador Sergio Salomón pondrá todo su capital político para que ella sea la abanderada de Morena en el 2024.
Esto tiene una lógica.
Y es que, Céspedes Peregrina, como ya lo habíamos mencionado semanas atrás en este mismo espacio, necesita un proyecto sólido para llegar con presencia y vigente al 2030, año en el que podría convertirse en el candidato de Morena al gobierno del estado, pues no está impedido por ley para regresar al Ejecutivo local tras esta administración.
El mandatario poblano tiene dos alternativas: conseguir una diputación federal o una senaduría plurinominal en los próximos comicios para tener juego en el próximo sexenio o sumarse al gabinete de Claudia Sheinbaum, en el caso de que ella gane las elecciones sucesorias del lopezobradorismo.
Ambas opciones no suenan nada descabelladas ni poco probables de que se concreten, ya que Sergio Salomón, difícilmente, pedirá licencia para pelear por un cargo de elección popular en las elecciones venideras, por lo que su ruta estará en la lista de representación proporcional que Morena propondrá al Congreso de la Unión o en el equipo de trabajo con el que Sheinbaum Pardo gobernará al país.
El acto de la mañana de este miércoles, como lo señalé al inicio de esta columna, fue solo el pretexto para que Claudia presumiera el músculo político a casi seis meses de que se dé la definición del candidato de Morena para las presidenciales del próximo año.
La alianza de gobernadores morenistas con Sheinbaum marca la ruta del 2024 y Sergio Salomón Céspedes refrendó su lealtad al proyecto.
Decisiones que valen oro para el futuro cercano.