Estas son las historias de terror que vivieron poblanas en la Clínica de Especialidades Médico Quirúrgicas
Lo que prometía ser el inicio de una de las etapas más importantes en la vida de varias mujeres poblanas terminó convirtiéndose en una auténtica pesadilla. Decenas de denuncias han salido a la luz pública en redes sociales señalando presuntas negligencias médicas, cobros excesivos y tratos inhumanos por parte del Dr. Tizcareño W y su padre, el Dr. Willebaldo Montiel, en la Clínica de Especialidades Médico Quirúrgicas en Puebla, ubicada en la 15 Sur #505.
La gravedad de las acusaciones llevó a la Secretaría de Salud del estado, a través de la Dirección de Protección contra Riesgos Sanitarios (DPRIS), a suspender temporalmente el funcionamiento de esta clínica por representar un riesgo para las y los pacientes.
Sin embargo, las víctimas exigen justicia, una investigación profunda y sanciones que vayan más allá de un simple cierre temporal.
“Mi hijo casi muere por culpa de su ambición”
Una de las denuncias más impactantes es la de Silvia Flores Arenas, quien relató en su cuenta de Facebook el calvario que vivió al dar a luz a su hijo en enero de 2025.
Silvia acusa al Dr. Tizcareño de haberla dejado esperando durante horas en quirófano con presión alta, preeclampsia y la placenta al borde del desprendimiento, todo porque el médico estaba ocupado resolviendo supuestos problemas bancarios.
La cesárea de emergencia se retrasó más de tres horas. Cuando finalmente nació su bebé, fue trasladado a incubadora sin una explicación clara. La pediatra le exigía 2 mil pesos por cada revisión de cinco minutos y prescribía tratamientos que solo agravaban el estado del recién nacido.
Silvia denunció que se le retiró el ombligo a su bebé sin consentimiento, lo que provocó infecciones severas. A los pocos días, su hijo tuvo que ser trasladado de emergencia al Hospital de La Margarita del IMSS con neumonía y múltiples infecciones.
“Llegué a casa muerta en vida, sin mi bebé, destruida física, mental y emocionalmente. Esta pesadilla no puede repetirse. Que los perdone Dios, porque yo no puedo”, escribió Silvia, en una carta que ha resonado con miles de mujeres.
“Me dijeron que tendría una niña, nació un niño; me adelantaron el parto por dinero”
El caso de Martha Romero, originaria de Tlaxcala, también ha generado indignación. Narró que fue anestesiada por el propio Dr. Tizcareño —quien no tiene cédula para ejercer como ginecólogo ni anestesiólogo— y que en el momento del parto no había pediatra disponible.
Martha denunció que su cesárea fue adelantada tres semanas sin justificación médica, solo para acelerar los procedimientos previo al puente vacacional.
Una enfermera le confesó: “Corriste con la mala suerte de aliviarte en puente, quieren dinero para irse de vacaciones”.
Además, le habían asegurado que tendría una niña, pero nació un niño. Al igual que a Silvia, a su bebé le retiraron el ombligo y le generó múltiples infecciones que incluso lo llevaron al borde la muerte. «A las seis de la tarde vienen a quitarte la sonda para que vayas a ver a tu bebé y por lo menos te puedas despedir de él», le dijo una doctora.
«Cuando vi a mi bebé estaba intubado, morado y no respondía. Nunca te imaginas ver a tu hijo así. No había pediatra, ella tardó casi dos horas en llegar al hospital»
Además, la dieron de alta con un catéter y una sonda en su cuerpo sin avisarle, por lo que se le infectó la herida y tuvo que acudir a otro hospital.
“Para el doctor no hubo problema, porque ‘nadie murió’ y, según él, tiene dinero para callar a quien sea”, dijo Martha.
Le quitaron un ovario sin aviso; «Tengo para pagar la vida de quien sea”
Una tercera denuncia fue presentada por el esposo de una paciente, quien acusó a los médicos de haberle retirado un ovario a su esposa bajo el argumento de que era un tumor, sin presentar pruebas, solo para cobrarle la extirpación.
Tras la cirugía, su esposa fue dejada en estado grave, por lo que fue ingresada nuevamente al quirófano y le exigieron pagar más de 3 mil pesos por cuatro bolsas de sangre. Al cuestionar sobre el estado de salud de su pareja, el personal médico se contradecía sobre si hubo perforación de matriz o un desprendimiento, y las enfermeras confesaron no saber qué hacer porque “no eran médicas”.
Cuando el esposo pidió explicaciones, fue recibido con burlas. “¿Qué quieres, dinero? Aquí lo que menos damos es dinero. ¿Quieres demandar? Demanda. Yo tengo dinero para pagar la vida de quien sea. La ley no me hace nada”, le dijo el doctor Tizcareño.
Estas son algunas otras denuncias que surgieron a raíz de la viralización:
«Jamás imagine algún día encontrar la respuesta de lo que le paso a mi hijo, hasta el día de hoy sigo en la lucha junto a mi pequeño vamos de hospital a hospital luchando porque salga adelante todo venía perfecto antes de nacer y cuando nació solo me dijo el Dr Wilebaldo yo se lo dije que en los varones suele pasar qué sean débiles por Dios el venía totalmente sano y por su negligencia después de 14 años sigo luchando para sacarlo adelante gracias a Dios lo sacamos de ese hospital donde me lo estaban matando cobrando mucho dinero hasta por dejarlo salir después del daño que le causaron por falta de oxígeno y atención pero él es un niño que le causaron una enfermedad pulmonar donde estuvo entubado y hasta el día de hoy sigue usando oxígeno y con una enfermedad incurable los tiempos de Dios son perfectos y tarde o temprano lo iban a pagar porque no se vale que esperamos a nuestros bebés con gran ilusión y todo cambia por su negligencia médica solo pido justicia para los bebés y mamás que murieron en la lucha».
«Mi esposa también tuvo un caso de negligencia con esos pseudo doctores que al día de hoy mi hijo está con las consecuencias de su negligencia, pero por miedo y por dar prioridad a la urgencia por la que uno pasa es que no alza uno la voz»
«De verdad cuando yo me enteré de mi bebé venía en camino fui con él pues en Facebook tenía mucha propaganda me dio inseguridad pues era particular y fui a dos consultas me trató una asistente de él jamás tuve la oportunidad de conocerlo pues ponía a otras personas dando recetas a nombre de él ya selladas y firmadas me causó ruido fui con otro ginecólogo y me dijo cuidado el es médico general no tiene cédula de ginecólogo y si en la receta solo médico cirujano. Partero no dudo que sea bueno pero una urgencia ginecológica no sé si la pueda cubrir me dio mucho miedo no regrese ya con el repito no te atendía el solo chicas a nombre de él con recetas firmadas al mes de que naciera mi bebé la clínica estaba clausurada por muérete materna de verdad que todas las mamis hablen de esto pues yo salí a tiempo pero al parecer otras no y es muy triste»
Operaban sin cédula de ginecología
Tras las múltiples acusaciones, se descubrió que el Dr. Tizcareño sólo cuenta con cédula como Médico Cirujano, sin especialidad en Ginecología ni Obstetricia, lo cual le impide legalmente practicar partos o cesáreas. En cuanto las denuncias comenzaron a viralizarse, el médico restringió sus redes sociales y eliminó contenido.
Más alarmante aún es el caso de su padre, el Dr. Willebaldo Montiel, quien pese a tener especialidades en Anestesiología, Medicina Crítica e Interna, se promociona como experto en partos y embarazos de alto riesgo, participando activamente en procedimientos materno-infantiles.
Las víctimas denuncian que esta clínica ha operado por años bajo una fachada de legalidad, pero ha acumulado quejas por negligencia, abusos financieros y maltrato. Las autoridades ya han suspendido su operación, pero los testimonios indican que no es la primera vez que se realiza una clausura, y que siempre encuentran la manera de seguir operando.
Exigen justicia y revocación de cédulas
Ante la gravedad de los testimonios, colectivos de mujeres, madres y usuarios exigen:
- La inhabilitación definitiva de los médicos señalados.
- La revocación de sus cédulas profesionales ante la SEP y autoridades médicas.
- Una investigación penal y civil por negligencia médica y usurpación de profesiones.
- Atención integral y reparación del daño para las víctimas y sus familias.
