‘IT Welcome to Derry’ construye el universo más ambicioso de Stephen King en televisión
IT Welcome to Derry no solo se ha convertido en uno de los estrenos más fuertes del año para HBO, sino que también está demostrando ser una de las expansiones narrativas más cuidadosas y ambiciosas del universo de Stephen King. La precuela, situada décadas antes de los sucesos vistos en It (2017), profundiza en los ciclos históricos de Pennywise y en los traumas fundacionales de la ciudad, construyendo un proyecto que va mucho más allá de su éxito de audiencia.
Aunque la serie ha reunido cifras destacadas —con un promedio de 9.2 millones de espectadores por episodio en Estados Unidos y un alcance global que ronda los 15 millones— su verdadero valor está en la forma en que recupera y entrelaza elementos del canon literario para expandir el horror de King con nuevos matices.
Andy y Barbara Muschietti han explicado que la producción fue concebida como una historia de tres temporadas, cada una retrocediendo 27 años en el tiempo para mostrar los distintos ciclos de actividad de Pennywise. La primera temporada se sitúa en 1962 y explora el incendio del Black Spot, un club fundado por soldados afroamericanos cuya destrucción, según la novela, marca uno de los episodios más violentos e influyentes en la historia de Derry.
La ambición narrativa se siente incluso en los detalles. En los créditos del segundo episodio aparecen referencias directas a dos tragedias emblemáticas del libro: la masacre de la Bradley Gang de 1935 —en la que ciudadanos de Derry asesinaron públicamente a un grupo de delincuentes— y la explosión de las Kitchener Ironworks de 1908, que provocó la muerte de 102 personas, incluidos 88 niños durante una búsqueda de huevos de Pascua. Estos guiños funcionan como anuncios naturales de lo que podrían ser las temporadas dos y tres, siempre que la serie reciba luz verde por parte de HBO.
Mientras el público sigue respondiendo positivamente y la serie se mantiene entre lo más comentado de la plataforma, IT: Welcome to Derry continúa consolidándose como un proyecto que no solo revive el terror clásico, sino que lo reescribe desde sus raíces históricas. Si la producción logra mantener esta visión de largo alcance, podría convertirse en una de las exploraciones más profundas y respetuosas del universo creado por King.
Por ahora, la precuela se sostiene como un éxito consistente y una muestra clara de que aún quedan rincones oscuros de Derry por descubrir.
