Sergio Ramos no digirió bien el golpe que se llevó de Martin Odegaard a los 11 minutos del encuentro de este jueves en el Bernabéu y por el que el jugador noruego vio la cartulina amarilla.
Ramos y Odegaard, que compartieron vestuario en el Real Madrid durante toda la temporada 16/17, disputaron un contrabalón que ganó el andaluz y que acabó con los tacos de la bota izquierda del realista en la espinilla del capitán blanco.
«¡Odegaard! ¡Me cago en tu p… madre», dijo a gritos Ramos mientras se dolía del golpe, según captaron las cámaras de Jugones de LaSexta. Odegaard se justificó ante Mateu Lahoz diciendo que antes de golpear a Ramos había tocado el balón, pero eso no le libró de ver la tarjeta amarilla.
A Ramos le molestó especialmente que Odegaard no se preocupara por su estado ni le pidiera disculpas. En un córner posterior, se encargó de recordárselo personalmente a Odegaard: «Por lo menos pídeme perdón».