Por: Gerardo Ruiz / @GerardoRuizInc
Nada gana Genoveva Huerta al negar su alianza con Fernando Manzanilla, más que demostrar que el diputado federal del PES es quien controla el Comité Directivo Estatal del PAN en Puebla.
Excusatio non petita, accusatio manifesta.
Las pruebas están a la vista de todos, aunque “La Jefa Geno” jure y perjure que El Conejo Mayor no está detrás de ella.
En mi entrega del pasado martes, exhibí una vez más el amasiato entre Manzanilla Prieto y Huerta Villegas, quienes buscan imponerle al síndico al candidato del PAN a la alcaldía de la Angelópolis, en la figura de Dolores Cervantes, delfín de la lideresa estatal panista que hace campaña para el excuñado del siniestro Rafael Moreno Valle.
Manzanilla y Genoveva quieren agandallarse hasta la sindicatura de Puebla
Genoveva se aferra a negar lo innegable.
Otro argumento que comprueba la injerencia que Fernando Manzanilla tiene en el panismo poblano son las constante reuniones que el legislador ha sostenido con diferentes liderazgos del albiazul y de otros partidos en la Torre El Encanto, ubicada en La Vista Country Club, en donde el investigado extitular de la Segob ha acordado con lo que queda del morenovallismo con dos claros objetivos: bloquear a Eduardo Rivera como candidato del PAN al Ayuntamiento capitalino y descarrilar al gobernador Miguel Barbosa en su proceso sucesorio rumbo al 2024.
Al decir de diferentes fuentes consultadas por este reportero, Manzanilla, a finales del año pasado, rentó uno de los departamentos de la planta baja de este edificio para encabezar reuniones clandestinas en los que conjura contra Rivera Pérez y Barbosa Huerta, además de ofrecer candidaturas a nombre de Genoveva Huerta.
(Justo hace unos días, Miguel Barbosa aseguró que “los delincuentes más importantes viven en los fraccionamientos más caros de Puebla”. Todos sabemos los nombres de esos delincuentes).
No sólo eso, desde este lugar Fernando Manzanilla concretó la idea de quitarle la mitad de los espacios de la planilla que encabezará, sí o sí, Lalo Rivera por la alcaldía de Puebla capital.
Eduardo “El Rasputín” Alcántara, el gran infiltrado de Manzanilla Prieto, fue quien convenció a Genoveva Huerta de exigirle 8 regidurías a Rivera Pérez para el grupo de liliputienses, que obedecen las órdenes del “Conejo Mayor” y de “La Jefa Geno”.
También, desde el departamento en la planta baja de El Encanto se han planeado las denuncias por actos anticipados de campaña promovidas ante el IEE en contra de Rivera Pérez.
El periodista Alejandro Mondragón explicó en su columna de este jueves que tras la reunión el pasado martes en el Hotel Hilton de siete horas en la que participaron Eduardo Rivera; el secretario general del CEN del PAN, Héctor Larios; la presidenta estatal Genoveva Huerta; y el dirigente municipal Jesús Zaldivar, el exedil amenazó con irse a Movimiento Ciudadano y no ceder más de dos espacios en su planilla al grupo de genomanzanillista.
Ver: Al descubierto el «fuego amigo» de Genoveva Huerta
La versión esparcida por “La Jefa Geno” es falsa otra vez, ya que la lideresa panista busca dejar, una vez más, a Rivera como el intransigente cuando la realidad es otra.
El encuentro que inició a las 11 de la mañana y que terminó a las 6 de la tarde, que también contó con la presencia de José Luis Ovando, delegado del CEN panista en Puebla, quien junto con Larios fueron los que condujeron la mesa en una postura neutral, fue reventado por Huerta Villegas, al siempre mostrar una celeridad incómoda en las negociaciones con el exalcalde, ante su necedad de quedarse las 8 posiciones que estarán a disposición del PAN para después bajar su número a 6.
Rivera dijo que solo entregaría 4 espacios para el grupo de Genoveva, uno más de lo que ofreció hace un par de semanas. Jamás hubo un amague de irse a Movimiento Ciudadano ni mucho menos se habló de las diputaciones locales. Lo que sí es cierto es que Rivera Pérez ya abrió la posibilidad de incluir al grupo de “La Jefa Geno” en la integración de su gabinete.
Ahora falta que Huerta le pida el Visto Bueno a Manzanilla para aceptar la propuesta de Lalo.
Insisto, Genoveva busca dejar como el necio y cerrado a Lalo Rivera cuando es de todos sabido que ella encabeza una dictadura y quiere ‘comerse el pastel sola’.
Como última prueba del amasiato entre Genoveva y Fernando está el regreso de Sandra Izcoa, ex secretaria particular de Martha Erika Alonso, a la Dirección de Comunicación Social del Comité Estatal del PAN tras fungir como el enlace de medios de Manzanilla Prieto durante los últimos meses.
Ver: Toma Todo: la pirinola de Genoveva Huerta
Ya solo falta que la reina de los troles, Michelle Olmos, también anuncie su llegada al Comité del albiazul.
Resulta muy raro que justo el día en el que Huerta Villegas decide embestir a Fernando Manzanilla en redes, también se anuncia la incorporación de Izcoa Reyes al CDE panista.
¿O me equivoco?