Con el grito: «señor, señora no sea indiferente, se mata a la mujer enfrente de la gente», así protestaron mujeres en la calle Independencia en el centro de la ciudad de Tehuacán.
Efecto Comunicación en esa ciudad lo constató. El grito era desgarrador. Pedían sin duda alguna justicia para la jovencita estudiante, Suri Saday.
Los feminicidios en Puebla continúan y contando.
Sirvió o sirve de algo poner alerta de género en 50 municipios poblanos, cuando estamos viendo que siguen asesinando a nuestras mujeres.
El gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, es este caso, advirtió que no quedará impune el feminicidio de la joven Suri Saday del municipio de San Antonio Cañada del Valle de Tehuacán, luego de que fue encontrada semidesnuda y con huellas de violencia, por lo que se comprometió en encontrar pronto a los responsables.
Un dato arrojado por el observatorio de Violencia Social y de Género, detalla que durante el primer semestre de este 2021, Puebla presentó un feminicidio cada 4.5 días, lo que nos deposita en 39 asesinatos, agresiones de género o feminicidios, como lo clasifiquen, es lo mismo.
En el último fin de semana fue muy violento para las mujeres y quedó asentado.
En Atlixco, un militar asesina a su cuñada y luego se suicida el asesino tras verse rodeado y sin más escape que haber acabado en una cárcel de Puebla.
Después, en la zona de Angelópolis, una mujer es agredida por otro familiar, casualmente, su cuñado, que dice la arrolla con su unidad y poco después autoridades policiales de San Andrés Cholula, lo dejan libre.
Puebla como estado, tiene el nada honroso quinto lugar en feminicidios, cifras que se tienen que comenzar a trabajar para revertirse.
El primer paso del gobierno del estado está dado, vigilará y supervisará perfiles de quienes vayan a la cartera de titular de seguridad pública en los municipios más importantes a partir del 15 de octubre.
Que el grito consignado por habitantes de Tehuacán “señor, señora no sea indiferente, se mata a la mujer en frente de la gente” se ahogue.
Que la acción de defensa a la mujer para evitar feminicidios funcione.
El asesinato de la jovencita Suri Saday, lo sugiere.
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