En política nada es casualidad. El mismo día que el barbosismo se hizo de manera oficial de la dirigencia estatal de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el diputado federal, Ignacio Mier Velazco inundó el centro de Puebla con la publicidad de su informe de gobierno.
Esta fue la respuesta del ex priista a su nula operación para ganar espacios en el Consejo Estatal y pelear por carteras del Comité Ejecutivo Estatal.
Sin embargo, una vez más demostró su desesperación y confirmó que su nivel de conocimiento entre los poblanos es paupérrimo.
Nacho Mier pretende ser candidato a gobernador de Puebla en 2024 con la bendición del dirigente nacional, Mario Delgado.
De nueva cuenta buscan aplicar como método de selección una “encuesta” que beneficie al legislador federal, quien es un desconocido entre los poblanos.
Por ello, les urge que la cara del ahijado político de Manuel Bartlett aparezca por todos lados para hacerlo competitivo.
La constante en la estrategia de Mier han sido los errores. Para publicitar su informe legislativo, el legislador inundó el Centro Histórico con su publicidad.
La zona turística más importante de Puebla fue usada por este personaje con fines electorales. Un verdadero insulto para los visitantes de la Angelópolis.
En próximos días seguramente se presentará una denuncia en contra del diputado federal de Morena, pues está usando un cargo público para promocionar su imagen personal, lo cual está prohibido por la Constitución y la Ley Electoral.
También tendrá que aclarar cuánto dinero se gastó para publicitarse y de dónde salieron los recursos.
En su afán de darse a conocer, Nacho Mier se ha metido en un problema más que se suma a los otros que ya tenía como los señalamientos por lavado de dinero.