Nace la nueva clase política armentista
Una de las mentes más brillantes y lúcidas que ha dado la política de Estados Unidos, Eleanor Roosevelt, decía que “el futuro pertenece a quienes creen en la belleza de los sueños”.
Este lunes durante la ceremonia de colocación del bando solemne, que lo acredita como gobernador electo, afuera de Casa Aguayo, Alejandro Armenta hizo una reflexión sobre la importancia de los sueños en las personas que se dedican al servicio público.
¿En qué sueña un gobernador?
¿Con qué se ilusiona?
¿Cuáles son sus anhelos en esta nueva dinámica del poder en la era lopezobradorista?
El futuro gobernador de Puebla comentó que este sueño de encabezar el Ejecutivo local comenzó en 1990 cuando fue director del deporte en Acatzingo, pero la ilusión de llegar a la posición que está a unos días de asumir inició hace 20 años.
Un sueño que tuvo que esperar 2 décadas.
El futuro de Puebla le pertenece y está en las manos de Armenta Mier, como lo decía la esposa del presidente estadounidense Franklin D. Roosevelt.
“Muchas gracias, Puebla, por permitirnos soñar (…) Llevo desde 1990 cuando inició mi vida pública en Acatzingo coordinando el deporte, las asambleas comunitarias. Son 34 años de vida pública y al servicio. Realmente cuando empecé a soñar en representar a Puebla fue hace como 20 años, pero hoy este sueño a mí me marca, me obliga, me mandata a ser todo lo que esté a nuestro alcance, en equipo, porque no se hacen las cosas solos, esos anhelos que tienen las y los poblanos”.
Y sí, Alejandro Armenta no se equivoca al precisar que este sueño personal es ahora un sueño colectivo.
Un sueño en el que cabe su naciente clase política.
Un sueño en el que también caben todos los y las poblanas que esperan que la situación tan delicada de violencia por la que atraviesa nuestro estado mejore.
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El gobernador electo fue otra vez insistente en lo que serán sus mandamientos durante su administración.
Consagración, pasión y entrega.
La nueva clase política armentista no la tendrá nada fácil.
Insisto, Puebla se encuentra en un presente más que preocupante ante la crisis de seguridad que se ha venido encrudeciendo en los últimos días.
No por nada, el futuro mandatario ha puesto en las principales posiciones del tablero geopolítico de Puebla a sus soldados más fieles, capaces y leales.
En el Poder Legislativo local está Laura Artemisa García, una de las mujeres en las que Armenta tiene depositada toda su confianza para darle estabilidad y buen camino al Congreso del estado a pesar del poder absoluto que se vive en esta soberanía.
En su gabinete estarán hombres y mujeres, quienes –junto con él– soñaron en representar a Puebla y trabajar por un estado mejor.
En su nueva clase política que estará colaborando con él destacan José Luis García Parra, José Tomé, Samuel Aguilar Pala, Javier Sánchez Galicia, Silvia Tanús, Gabriela “La Bonita” Sánchez, Claudia Hernández, Virginia González Melgarejo, Josefina Morales Guerrero, Rebeca Bañuelos, por mencionar a algunos.
Este miércoles podrá decirse que nació de manera oficial la clase política que tiene como jefe político a Alejandro Armenta.
El relevo generacional está en marcha.
Consagrarse a Puebla será su marca personal.
Alejandro Armenta se los ha venido repitiendo a diario.
El sueño personal que inició en 1990 ahora es un sueño colectivo.
Sí, “el futuro pertenece a quienes creen en la belleza de los sueños”.
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