Por: José Antonio de la Vega Moreno / @Tono_delaVega
La llegada de las vacunas contra la Covid-19 a México es un oasis en el desierto para todos los mexicanos, no hay uno solo que no festejemos su arribo, sin duda.
Lo francamente lamentable, es que no se cuente con un plan de vacunación eficiente no solo en Puebla, sino quizá en la mayoría de los estados que ya han iniciado la inmunización de sus adultos mayores.
En las 39 comunidades de San Andrés Cholula, la aplicación de la vacuna contra el virus, fue todo un caos y una olímpicamente desorganización.
Colas de cientos de adultos mayores, que desde muy de madrugada emprendieron la travesía de formarse para ir en busca de la vacuna prometida.
Nunca pensaron toparse con que su pre registro no sirvió para nada. Que las largas horas de espera inyectados de angustia y desesperación, fueran para montar en cólera, protesta, por el mal manejo del proyecto de sanidad.
Toda la responsabilidad apunta dicen, al inútil útil del Delegado de Bienestar en Puebla, Rodrigo Abdala. Quien lejos de planificar una campaña de vacunación correcta, hizo todo lo contrario, para que se le saliera de control está.
El gobierno del estado apoya, ayuda y coadyuva a la habilitación de espacios como centros de salud, canchas deportivas, quizá con el domo y ensillado del espacio, pero no tiene una sola mano metida en la logística del programa de inmunización.
El fracaso de la vacunación, tiene nombre y apellido: Rodrigo Abdala. Personaje que cuando se le ha puesto a prueba para la operatividad en la aplicación de cualquier proyecto o programa, fracasa.
Lo mismo hizo llevando a los abuelitos por sus cheques a telégrafos en plena Pandemia y no solucionó nada, más que pedir que concluyera su distribución y el cobro.
Hoy, el plan de vacunación contra la Covid-19 nos dice que no hay plan, mucho menos vacunación.
Pregunta para el super delegadazo, Rodrigo Abdala, por qué la vacunación antirrábica si funciona; por qué la vacuna contra la polio y otras enfermedades funciona.
Alguien a nivel nacional tiene que ser responsable del caos y desorden de la campaña de vacunación en Puebla, y claro que tiene nombre y apellido.: Rodrigo Abdala.
Lamentable.
Ley Agnes
Por fin en Puebla se reconoce el derecho a la identidad de género autopercibida.
Se aprobaron las reformas al Código Civil del estado, sin duda alguna una lucha ganada después de muchos años, muchas movilizaciones, pero sin lugar a dudas, después de hartas vidas arrebatadas.
Pero baste una sola vida para ejecutar este tipo de leyes.
De ahora en adelante, nada de oídos sordos a este tipo de reclamos de la sociedad, así sea una minoría.
Ley Agnes ya se escribió y signó en Puebla.
Enhorabuena.