El Barcelona regresó a los entrenamientos en la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Después de que los jugadores del Barça pasaran el miércoles el test del coronavirus de forma individual (el resultado de todos fue negativo), este viernes comenzaron a trabajar divididos en grupos. El martes, un director de partido de LaLiga acudió a la ciudad deportiva de Sant Joan Despí para asegurarse de que se respetaran las medidas que limiten al máximo el riesgo de contagio: accesos para entrar de forma individual, gel hidroalcohólico y medidas para la desinfección.
Se repartieron en dos grupos de 11 jugadores. En el primero que apareció fue Lenglet, que conducía su coche con mascarilla, 40 minutos antes de la hora de la convocatoria (9.30). Lo siguieron Suárez, Ter Stegen, Sergi Roberto, Griezmann, Messi, Umititi, Arturo Vidal, Alba (lo llevó su padre), Junior y Piqué. Todos estaban vestidos con la ropa del entrenamiento.
Los jugadores se repartieron en tres campos: el Tito Vilanova, donde habitualmente entrena el primer equipo, el número dos y el tres. Realizaron una suave sesión individual y regresaron, sin pasar por las duchas, a sus casas. El segundo grupo estaba convocado a las 10.45. Estuvieron todos menos Dembélé, que se recupera de una lesión. El extremo francés, que el miércoles no se realizó el test, lo hará el próximo lunes.
