Diez años después, Luisito decidió reencontrarse con él, pero esta vez el escenario fue completamente distinto.
Del “Rey del After” a rescatista de perros: la sorprendente transformación de Óscar y su reencuentro con Luisito Comunica

En 2015, un encuentro casual se volvió viral. Durante una de sus grabaciones, el youtuber Luisito Comunica conoció a un hombre en situación de calle que se hacía llamar “El Rey del After”.
Su carisma, frases espontáneas y estilo de vida fiestero llamaron la atención de millones de usuarios en redes sociales. Diez años después, Luisito decidió reencontrarse con él, pero esta vez el escenario fue completamente distinto.
Óscar, El Rey del After aquel personaje que alguna vez simbolizó los excesos, hoy ha dado un giro radical a su vida. Con más de dos años y medio sin beber, ha dejado atrás su adicción al alcohol y ahora dedica su tiempo a rescatar perros callejeros, ofreciéndoles una nueva oportunidad de vida.
“Sobreviví porque pasé una experiencia muy dura. Admitir que tenía un problema con el alcohol fue el primer paso. Hoy sigo luchando con el corazón por mi propio proyecto”, confesó Óscar durante la charla con Luisito.
El Rey del After: Un despertar doloroso pero decisivo
Óscar recuerda que durante años vivió sumido en una rutina autodestructiva. Su fama repentina, alimentada por el video viral, lo mantuvo atrapado en una vida de fiestas y excesos. Sin embargo, fue un encuentro con unos niños lo que marcó su punto de quiebre.
“Me pidieron una foto y pensé: ‘¿qué ejemplo les estoy dando?’”, contó. Aquella reflexión lo llevó a reconocer que necesitaba cambiar. Buscar ayuda profesional, apoyarse en familiares y amigos, y aceptar su enfermedad fueron pasos fundamentales para iniciar su recuperación.

Una nueva vida junto a sus perros
Hoy, su historia es sinónimo de esperanza. Óscar dedica sus días a cuidar y rehabilitar perros callejeros. Todo comenzó con Rufus, un can que encontró deambulando por la avenida Álvaro Obregón. Tras rescatarlo y devolverlo a su familia, comprendió que había encontrado un nuevo propósito.
Tiempo después llegó Román, un perro que había sido maltratado y vivía rodeado de violencia. Óscar lo adoptó y, al igual que él, inició un proceso de sanación.
“Decidí cambiarle el nombre. Antes lo llamaban ‘El asesino’, pero ahora es Román, porque merece una nueva historia, como yo”, relató emocionado.
Hoy, aquel “Rey del After” que alguna vez fue símbolo del desenfreno se ha convertido en un ejemplo de superación y empatía. Su historia demuestra que, incluso después de tocar fondo, siempre hay una oportunidad para reinventarse y encontrar un nuevo propósito en la vida.
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