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‘La sustancia’: la lucha contra el estereotipo de la mujer desechable

El tema fue abordado en la película La Sustancia , protagonizada por Demi Moore, donde una celebridad lucha por mantenerse joven a cualquier precio.
'La sustancia': la lucha contra el estereotipo de la mujer desechable

Una actriz y escritora, cuya identidad no ha sido revelada, compartió recientemente su experiencia con la cirugía plástica, revelando que a los 12 años decidió someterse a una operación para corregir sus orejas que sobresalían, esto la llevó a escribir un poema sobre las mujeres que habían hecho todo lo posible por mantenerse jóvenes y deseables, lo cual parece una escena de La sustancia, la película de terror corporal de la directora Coralie Fargeat.

Aunque nunca había hablado públicamente de su decisión, explicó que las burlas en la escuela y el temor al juicio de millones de personas en las pantallas influyeron en su elección. A través de los años, esta experiencia la llevó a reflexionar sobre las presiones estéticas que enfrentan las mujeres, especialmente en la industria del entretenimiento.

'La sustancia': una lucha contra el síndrome de la mujer desechable
‘La sustancia’: la lucha contra el síndrome de la mujer desechable | Foto: Especial

La actriz señala que, en su juventud, escribió un poema sobre los estándares irreales de belleza en el mundo del espectáculo, criticando el deseo de muchas mujeres de mantenerse jóvenes y deseables a través de cirugías. Sin embargo, admite que al someterse a la operación, también ocurrió a esas mismas expectativas.

El tema también fue abordado en la película La Sustancia , protagonizada por Demi Moore, donde una celebridad lucha por mantenerse joven a cualquier precio. La actriz ve paralelismos entre su propia vida y la trama de la película, reconociendo que estas presiones no son exclusivas de Hollywood, sino que afectan a mujeres en todas partes del mundo.

'La sustancia': una lucha contra el síndrome de la mujer desechable
La sustancia la lucha contra el síndrome de la mujer desechable | Foto: Especial

A los 41 años, la actriz se siente más en paz con su cuerpo, aceptando sus imperfecciones. Sin embargo, reconoce que el deseo de sentirse bella y deseada sigue presente. La reflexión final es una advertencia sobre los peligros de la búsqueda constante de la perfección, y un llamado a aceptar la imperfección ya desafiar los ideales impuestos por la sociedad.

Con información de New York Times



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