Concejal de Ucrania detona granadas en plena sesión de ayuntamiento; hay 26 heridos
En un impactante incidente, un concejal ucraniano detonó varias granadas dentro del ayuntamiento de la localidad de Keretsk, en la región de Transcarpatia de Ucrania occidental, el viernes 15 de diciembre, dejando un saldo de 26 personas heridas, seis de ellas en estado grave, según informó la Policía Nacional ucraniana en sus redes sociales.
Las explosiones fueron capturadas en un video que fue difundido por las autoridades, quienes consideran el acto como un posible atentado terrorista.
Las imágenes han sido trasladadas al Servicio de Seguridad (SBU) para una investigación más exhaustiva.
El concejal responsable de las detonaciones fueron identificados como Serguí Bratin, miembro del partido del presidente ucraniano Volodímir Zelenski, Sluga Narodu (Servidor del Pueblo).
Además de enfrentar cargos por provocar las explosiones, Bratin también está siendo investigado por el presunto uso ilegal de armas, municiones o explosivos, delito contemplado en el código penal ucraniano.
Ayuda internacional a Ucrania para enfrentar la guerra
En medio de este preocupante incidente, varios países del norte de Europa confirmaron nuevos paquetes de ayuda a este país para enfrentar la situación política y militar.
Estos esfuerzos se intensifican ante el bloqueo en Estados Unidos que impide la aprobación de una significativa partida multimillonaria propuesta por la Casa Blanca para Kiev.
El presidente Volodímir Zelenski destacó los acuerdos sellados durante la reciente cumbre ucraniano-escandinava y anunció el compromiso de algunos países participantes de ofrecer envíos adicionales de ayuda militar.
Entre estos países, Dinamarca se comprometió con un nuevo paquete de mil millones de dólares, destinado a protección aérea, artillería y otros recursos. Noruega, por su parte, prometió 400 millones en ayuda militar.
Además, el mandatario ucraniano adelantó que Finlandia y Suecia están preparando nuevos paquetes de ayuda, mientras que Islandia se dispone a aprobar «un programa de apoyo financiero a largo plazo». Estos esfuerzos buscan proporcionar a Ucrania los recursos necesarios para hacer frente a la situación interna y asegurar su estabilidad en medio de tensiones políticas y militares.