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Un estudio dental forense y un análisis de ADN revelaron que los restos de un cuerpo hallados en una playa de la prefectura de Miyagi, en el noreste de Japón, pertenecen a Natsuko Okuyama, una mujer que desapareció tras el terremoto y tsunami que azotaron al país en 2011.
Las autoridades especulan que la mujer de 61 años, fue arrastrada por el tsunami cuando se dirigía de su trabajo a su casa después del terremoto.
En un comunicado, el hijo de la Natsuko se dijo muy feliz de que por fin hayan encontrado a su madre.
“Estoy muy feliz de que hayan encontrado a mi madre, ya que se acerca el décimo aniversario [del desastre]. Esto me permitirá ordenar mis emociones y seguir adelante”.
El hallazgo se dio después de 10 años del terremoto de magnitud 9.0, uno de los más fuertes jamás registrados, mismo que provocó un devastador tsunami en la costa norte de Japón además de un accidente nuclear en una planta en Fukushima.
