Un incendio forestal declarado en la noche del martes entre los municipios de Arafo y Candelaria, en la isla canaria de Tenerife, continúa propagándose sin control y ha consumido al menos mil 800 hectáreas de terreno.
Con un perímetro de 22 kilómetros, parte de los cuales resultan inaccesibles tanto por vía aérea como terrestre, el incendio se encuentra fuera de control, según confirmó el presidente de Canarias, Fernando Clavijo.
La magnitud del incendio abarca los municipios de Arafo y Candelaria, así como zonas limítrofes en Santa Úrsula y La Victoria, ubicados en el norte de la isla.
Estas áreas están compuestas en su mayoría por núcleos de población dispersos y segundas residencias, lo que ha llevado a que muchos residentes aún no hayan hecho uso de los dos albergues dispuestos en Arafo y Candelaria para su asistencia.
«Está en una zona de difícil acceso que nos anticipa una noche complicada», explicó el presidente Clavijo en una entrevista en RNE.
El fuego se originó pasadas las 23:30 horas en los montes de Arafo, con múltiples focos que rápidamente se extendieron a la zona alta de Candelaria, obligando a evacuar varios núcleos poblacionales de estos dos municipios del sur de la isla.
La orden de evacuación incluye también a los municipios de La Victoria, Santa Úrsula, La Orotava y El Rosario, con la posibilidad de afectación a bienes materiales.
La dificultad en la extinción del incendio se debe a la topografía escarpada y compleja del terreno.
Un total de 14 aeronaves y 270 efectivos, incluyendo combatientes, personal de seguridad y logística, han participado en las labores de extinción, a los que se sumarán 258 operativos terrestres durante la noche.
Además, el gobierno de Canarias ha solicitado la incorporación de tres hidroaviones, previendo su llegada a la isla en las próximas horas.