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Un médico que fue acusado de robar vacunas contra el COVID-19 en Texas podría pasar hasta un año en prisión por este delito.
El doctor de nombre Hasan Gokal fue acusado de robar un frasco con nueve dosis del centro de vacunación en el que trabajaba, ubicado en el condado de Lyndsay Lyons Park.
Según autoridades, el médico administró las dosis a amigos y familiares, violando el lineamiento que indica que los primeros en vacunarse deben ser las poblaciones vulnerables y el personal de salud que atiende a pacientes con la enfermedad.
El doctor fue despedido de inmediato de su centro de trabajo y este jueves. El médico podría pasar un año en prisión y pagar una multa de 4 mil dólares, si se le encuentra culpable.