Las lluvias torrenciales registradas el fin de semana en Pernambuco, Brasil, han dejado al menos 91 personas muertas por deslizamiento de tierras y el colapso de viviendas que fueron arrastradas por corrientes agua y lodo.
De acuerdo con El País, aún se encuentran 26 personas desaparecidas y alrededor de cinco mil se quedaron sin hogar, por lo que pasaron el fin de semana en refugios, pues en solo dos días, llovió el 70% de lo previsto para todo el mes de mayo.
“Lamentablemente estas catástrofes ocurren. Un país continental (como Brasil) tiene sus problemas”, dijo el presidente Jair Bolsonaro, al informar que las lluvias dejaron cientos de muertos en Rio de Janeiro, Bahia y Minas Gerais.
Las lluvias continuarán durante los próximos días de manera moderada, por lo que el gobierno federal prometió ayudas de emergencia por mil millones de reales.
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Foto: Joao Carlos Mazella (AP)
