En un sorprendente reportaje estrenado el 6 de junio, la periodista Pamela Cerdeira expuso que las donaciones recolectadas por el gobierno de la Ciudad de México destinadas a ayudar a Turquía después de los terremotos nunca llegaron a su destino, e incluso nunca salieron de la ciudad. Lo más alarmante es que se descubrió que una de las donaciones terminó en un mercado local.
Después de los devastadores sismos en Turquía, el gobierno capitalino estableció un centro de acopio en el Zócalo, al que miles de personas acudieron para donar alimentos y otros artículos humanitarios con la esperanza de que fueran enviados a quienes más los necesitaban.
La periodista Pamela Cerdeira solicitó información a la Secretaría de Gobierno de la CDMX, quien respondió que se habían reunido 30 toneladas de víveres. Según la versión oficial, todo se envió al hangar de la Secretaría de la Defensa Nacional en Santa Lucía y posteriormente se despachó a Turquía, incluso se proporcionaron fotos como evidencia.
Sin embargo, las averiguaciones realizadas por la periodista revelaron otra realidad. Colocó dispositivos de localización conocidos como AirTags dentro de un paquete de papel higiénico y una bolsa de arroz que había donado en el centro de acopio.
El 15 de febrero, la bolsa de arroz se encontraba en un almacén de la Secretaría de Finanzas, mientras que el paquete de papel higiénico estaba en las oficinas de la Secretaría de Gobierno. El 2 de marzo, el equipo de la periodista acudió en busca de los productos para verificar si realmente se habían enviado a Turquía.
Para su asombro, descubrieron que el paquete de papel higiénico había terminado en un mercado en Tacuba, mientras que la bolsa de arroz había sido entregada a un banco de alimentos perteneciente a un diputado de la CDMX.
El vendedor del puesto en el mercado de Tacuba explicó a la periodista que había comprado el papel higiénico a vendedores ambulantes en la Merced. Resultaba prácticamente imposible que estos productos pudieran llegar a Turquía desde el mercado.
A partir de este revelador reportaje, se desprende que el gobierno de la CDMX proporcionó información falsa en respuesta a la solicitud de transparencia, las donaciones nunca llegaron a su destino y en algún punto del proceso, alguien se apoderó de ellas y las vendió.
Ante estas acusaciones, el secretario de Gobierno de la CDMX, Martí Batres, explicó que cada centro de acopio sigue un proceso riguroso para garantizar que las donaciones lleguen a su destino.
Sin embargo, manifestó su extrañeza ante los hallazgos presentados en el reportaje y afirmó que todo había sido entregado a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
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Foto: Captura de pantalla