La calma matutina en una pequeña cafetería de Mérida se vio abruptamente interrumpida cuando Emilia, una joven empleada, fue víctima de un episodio de agresión e intimidación por parte de un extranjero identificado como Joan Serra Montagut.
La tranquilidad del establecimiento se quebró cuando la puerta se abrió de golpe. Joan Serra Montagut, un hombre que se hospedaba en un Airbnb cercano y que presumía de representar la cultura catalana en la región, irrumpió con actitud amenazante. Desde su ingreso, su comportamiento fue hostil y exigente.
😡💢 "Soy una persona que lucha por mejorar este pVt0 mundo y exijo respeto".
— Luis Gabriel Velázquez (@soyluisgabriel1) February 26, 2025
Así decía este cobarde y supuesto activista extranjero de nombre Joan Serra Montagut, al intimidar y amenazar a la trabajadora de una cafetería en #Mérida, #Yucatán, porque quería que le bajaran a la… pic.twitter.com/bevk7vH5cL
Joan Serra Montagut amenaza y violenta a una mujer en pleno servicio
Exigió que se bajara la música del local sin miramientos. Emilia, acostumbrada a la cortesía, acató la orden con la esperanza de apaciguar la situación. Sin embargo, esto no bastó para calmar al sujeto, quien escaló la agresión con insultos y amenazas.
«Voy a incendiar este lugar cuando haya clientes. Para que nadie olvide quién manda aquí», vociferó. Acto seguido, comenzó a romper objetos, arrojando un jarrón y una jarra de café al suelo, incrementando el terror de la joven, quien quedó atrapada tras la barra.
Ante la posibilidad de que la situación empeorara, Emilia intentó dialogar, pero sus palabras solo intensificaron la furia del agresor.
«Si llamas a la policía, lo lamentarás», amenazó, asegurando que tenía influencias que podían hacerla desaparecer.
Wey y cuando la gente le duele a reclamar, quiso sacar la carta de “Yo tengo años trabajando con mujeres”. Que cosa tan horrible. Si este wey es uno de los hombres que están trabajando en programas pro la mujer, no pues gracias.
— Meredith Gay 🛋️✨ (@MerGarza) February 26, 2025
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Intervención oportuna y denuncia formal
Cuando la tensión parecía insostenible, la llegada inesperada de una clienta habitual interrumpió la escena. El agresor, sorprendido por la presencia de una testigo, cambió su actitud, lanzó una última amenaza y se retiró del lugar.
Aún en shock, Emilia informó de inmediato a sus empleadores y, con el respaldo de la comunidad, presentó una denuncia contra Joan Serra Montagut.
La noticia se difundió rápidamente en redes sociales, donde los usuarios expresaron su indignación y exigieron justicia.
