Un 13 de septiembre, pero de 1847, ocurrió la Batalla de Chapultepec cuando Estados Unidos invadió México, un año antes, el presidente estadounidense James Polk decidió apoderarse de Alta California, Nuevo México y otros territorios del norte del país.
Esta guerra tuvo varias batallas, la última fue la de Chapultepec, cuando el general insurgente Nicolás Bravo mandó a un ejercito de 800 soldados para defender el Castillo, mientras que Estados Unidos contaba con 7 mil soldados.
La madrugada del 12 de septiembre de 1847 los estadounidenses bombardearon el castillo de Chapultepec.
A la mañana siguiente el bombardeo ceso, cuando los estadounidenses decidieron entrar a invadir el lugar, fue entonces cuando los cadetes mexicanos se enfrentaron cara a cara con los agresores para defender al país incluso con su vida.
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— @SEDENAmx (@SEDENAmx) September 12, 2021
El pasaje se conoce como la Gesta Heroica de los Niños Héroes, la cual señala que Juan Escutia, Agustín Melgar, Juan de la Barrera, Vicente Suárez, Francisco Márquez y Fernando Montes de Oca fueron los últimos en morir durante la batalla.
Incluso se dice que Juan Escutia, al ver que todo estaba perdido, se envolvió en la bandera mexicana y se lanzó al vacío para evitar que los estadounidenses se apoderaran de ella.
Sin embargo, esto es falso pues durante el sexenio de José López Portillo, el lábaro patrio fue devuelto al país, pues todo ese tiempo estuvo resguardado por los estadounidenses.
También los expertos se cuestionan por qué les llaman “niños” si no todos eran adolescentes, el más joven era Francisco Márquez quien tan sólo tenía 12 años al momento de su muerte, Vicente Suárez 14, Fernando Montes de Oca y Agustín Melgar 18, Juan de la Barrera 19 y Juan Escutia 20.
¿Fue un hecho heroico el del 13 de septiembre?
Los conservadores opositores, al gobierno de Benito Juárez difundieron rumores sobre que en realidad no eran cadetes, sino personas arrestadas en el Castillo de Chapultepec, otra versión señala que se encontraban en estado de ebriedad y por ello uno de ellos cayó al vacío.
La necesidad de Porfirio Díaz por crear una identidad nacional lo llevó a modificar detalles de lo sucedido aquél 13 de septiembre, por lo que ahora los cadetes tienen más relevancia, e incluso se creó la medalla de honor para venerar a los defensores del Castillo de Chapultepec.
La leyenda se plasmó en la historia de México y el mito de los Niños Héroes fue bien recibido por los mexicanos, quienes celebran una historia llena de valentía y nacionalismo en la que uno de los jóvenes cadetes se envolvió en la bandera y cayó en medio de una batalla.
¿Qué pasó después?
Cien años después de la Batalla de Chapultepec, en 1947 el presidente estadounidense Harry Truman visitó México, durante el gobierno del presidente Miguel Alemán.
El estadounidense fue bien recibido por su homólogo, sin embargo, la visita generó polémica desde su discurso pues durante su visita aseguró que: “Un siglo de rencores se borra con un mito de silencio”, y colocó una ofrenda floral en el antiguo monumento de los Niños Héroes.
La declaración generó el descontento de algunos cadetes del Colegio Militar quienes retiraron la ofrenda y la arrojaron a la embajada de Estados Unidos.
Gracias a este suceso se encontraron seis cráneos que las autoridades aseguraron pertenecían a los Niños Héroes.
La versión fue confirmada por Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y en 1952 se inauguró el “Altar a la Patria”, lugar en el que se depositaron los retos óseos de seis personas, pues nunca se comprobó científicamente y documentalmente que efectivamente se eran de los Niños Héroes.
