Este 8 de diciembre, se celebra el Día de la Inmaculada Concepción con una gran fiesta a la Virgen de Juquila con actividades culturales y recreativas.
Todos hemos escuchado hablar de la Virgen de Juquila, la cual se dice que es milagrosa y cada año recibe a más de 2 millones de peregrinos en su templo en Oaxaca, pero, ¿Conoces su historia?
En el año de 1552, el fraile dominicano Jordán de Santa Catalina trajo de España la pequeña imagen tallada de la virgen, al llegar a Oaxaca, el fraile decidió regalársela a un joven cuyo nombre se desconoce, quien estuvo a su servicio.
De acuerdo con el portal Viva Puerto, los habitantes de Amialtepec, de donde era originario este joven, veneraron a la virgen porque tenía fama de conceder las peticiones de sus devotos, su popularidad era tan grande que el sacerdote de Juquila Jacinto Escudero, ordenó que se trasladara a la iglesia de ese lugar.
Tiempo después la imagen de la Virgen desapareció y sorpresivamente fue encontrada de nuevo en Amialtepec, el sacerdote de Juquila acusó un robo, mientras en el otro municipio calificaron el hecho como un milagro.
Otro de los hechos que consideraron milagroso fue, que una vez la quema de bosques para preparar la tierra para la siembra, generó un gran incendio, sin embargo, la imagen permaneció intacta, solo su rostro estaba un poco ennegrecido y con algunas ampollas-
Los artesanos intentaron repararla, pero no tuvieron éxito, fue entonces cuando entendieron que ella quería tomar el color de sus devotos.
El dinero en esta comunidad comenzó a aumentar y con ello, la fama de la imagen lo que hizo que el sacerdote de Juquila fuera por ella nuevamente y trasladara a este municipio, pero al parecer a la Virgen no le gustaba este sitio, pues siempre “regresaba” a Amialtepec.
En 1719, el obispo trasladó definitivamente la imagen a Juquila y el 8 de diciembre de 1985 se llevó a cabo su coronación con una gran fiesta donde acudió la Orquesta Sinfónica de Oaxaca y el Nuncio Apostólico, Christophe Pierre representó al Papa Francisco.
El obispo de Puerto Escondido, Pedro Vázquez Villalobos explicó que para ellos es como una madre que los saca adelante, mucho más que su padre.
Cada 8 de diciembre, recibe alrededor de 2 millones de peregrinos quienes llegan en autobús, coche, bici y de pie.
El santuario también recibe mucha gente en los puentes y las vacaciones escolares.
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Foto: Quadrantín Oaxaca