A un mes de ser reportado como desaparecido en Puebla, el cadáver de Julio Cesar Márquez Osorio logró ser identificado por sus familiares.
El cuerpo de la víctima fue localizado desde el pasado 20 de mayo en una zona boscosa en los límites de las juntas auxiliares de Santa María Xonacatepec y La Resurrección.
Los restos del hombre de 47 años de edad se encontraban semienterrados, por lo que en un primer momento se presumió que podría tratarse de una «fosa clandestina», sin embargo, solo se localizó una víctima.
De acuerdo con la familia, Julio Cesar salió de su domicilio en la colonia Miguel Hidalgo, para vender un vehículo en Xonacatepec, dónde fue privado de la vida para despojarlo de la unidad.
La familia aseguró tener identificados a los presuntos responsables, por lo que exigió la intervención de las autoridades para detenerlos.
El cadáver se mantuvo en calidad de desconocido dentro del Servicio Médico Forense, hasta este fin de semana, cuando su familia acudió a reconocerlo.
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