Jacqueline Steffanoni / @jacquelinesteff
En el 2020 se ratificó la mala imagen que la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco tiene ante sus gobernados por el mal desempeño que ha tenido. A lo largo del año cometió pifia tras pifia, y a pesar de ello buscará la reelección el próximo año.
La militante de Morena perdió el control del Centro de Puebla, pues los ambulantes casi se han colocado en el zócalo de la ciudad. Sin embargo, ella asegura que no ve a los informales desbordados.
Ante las críticas a su administración ha recurrido al argumento de que ejercen violencia política de género en su contra, por lo cual denunció al gobernador de Puebla, pero su queja ya fue desechada.
Las encuestas son el fiel reflejo del desastre de Claudia Rivera. El 87.4% de los poblanos reprueban su trabajo.
Pero ella está aferrada en reelegirse y para ello emprendió una serie de acciones que le ayuden a mejorar su imagen como el incremento salarial del 4.1% a los burócratas, “escuchar” las peticiones de las feministas que tomaron el congreso, entregar despensas durante la pandemia, descuentos en el predial y hasta se subió al transporte público.
En ALMANAQUE te presentamos los errores más graves que ha cometido Claudia Rivera a lo largo del año.
Claudia Rivera gastó 20 millones de pesos en bolardos
A finales del año pasado, Claudia Rivera inundó de bolardos y macetas las calles de Puebla así como radares de velocidad que se instalaron en el Centro Histórico, en donde el Ayuntamiento invirtió 19 millones 304 mil pesos, contratos que fueron dados a conocer por ALMANAQUE en enero.
Cada maseta tuvo un costo de 7 mil pesos y los bolardos de mil 200 cada uno. Su adquisición tuvo muchas irregularidades, lo que provocó la renuncia de Alejandra Rubio Acle, secretaria de movilidad.
¿A dónde se fue Claudia Rivera? Desapareció los primeros días de pandemia
El 13 de marzo, la alcaldesa difundió un video para informar la suspensión de eventos públicos y privados debido a la crisis sanitaria de COVID-19 y el 6 de abril fue el último día en que se supo algo de Claudia Rivera.
Durante más de ocho días desapareció y ello coincidió con las vacaciones de Semana Santa. Mientras otros autoridades se mantuvieron activos al menos por redes sociales, ella se desconectó, y la duda de todos los poblanos fue ¿a dónde se fue la alcaldesa?
¿Dónde está la alcaldesa de Puebla? En plena contingencia sanitaria Claudia Rivera desapareció
Compra de ventiladores de segunda mano para pacientes COVID
El Ayuntamiento de Puebla invirtió 15 millones de pesos para comprar ventiladores a la empresa Fulle Hen, mismos que serían donados a la Secretaría de Salud estatal para la atención de pacientes COVID.
Sin embargo, al momento de ser entregados, autoridades estatales se percataron que eran de segunda mano y estaban en mal estado. Claudia Rivera se defendió al señalar que había pedido los equipos con especificaciones concretas, pero la empresa declaró que el gobierno municipal sabía que eran ventiladores ensamblados.
El gobierno de Claudia Rivera se comprometió a donar el recurso al estado. Sin embargo, el gobernador, Miguel Barbosa pidió que fuera en especie, lo cual salió contraproducente.
Pese a pandemia, DIF municipal compró juguetes para el Día del Niño
El 3 de abril –tres semanas después de que apareció el primer caso de COVID en Puebla- la administración de Claudia Rivera gastó 615 mil pesos para comprar juguetes que serían repartidos el Día del Niño, celebración que fue cancelada debido a la crisis sanitaria.
Los 15 mil juguetes fueron almacenados en unas bodegas por ocho meses y hasta apenas hace unos días, el Ayuntamiento los entregó a las presidencias de las 17 juntas auxiliares para que los repartieran entre los niños de dichas localidades.
La adquisición de estos productos entró dentro de las irregularidades por las cuales la Comisión Inspectora del Congreso del Estado exigió que la alcaldesa compareciera ante los diputados locales por posibles actos de corrupción.
Claudia Rivera pagó 615 mil pesos en juguetes del Día del Niño… el festejo se canceló por el COVID
Enfrentamiento con el gobierno del estado
En marzo, Claudia Rivera rompió los lazos con el gobierno estatal al desobedecer el decreto de Miguel Barbosa Huerta para asumir el control de la seguridad en el municipio y no retirar a Lourdes Rosales de su cargo.
Este fue el inicio de la guerra entre ambos órdenes de gobierno, la cual fue motivada por la alcaldesa quien, en repetidas ocasiones, retó al mandatario estatal y lo acusó de violencia política de género.
Incluso, Claudia Rivera denunció ante el Consejo Consejo General del Instituto Electoral del Estado al gobernador Miguel Barbosa Huerta luego de que el mandatario le solicitara que se pusiera a trabajar en seguridad y cumplir los decretos estatales en la capital.
Claudia Rivera da su propio Grito de Independencia
Luego de que el gobernador y Claudia Rivera dejaran sus diferencias atrás, estuvieron juntos durante el Grito de Independencia en el palco del Palacio Municipal.
Sin embargo, la alcaldesa revivió la lucha contra Miguel Barbosa minutos después de la ceremonia oficial al dar su propio Grito en las escaleras del Palacio Municipal al mencionar “Viva la autonomía municipal”
Obras de la 5 de Mayo se retrasaron cinco veces
Las obras de la 5 de Mayo se han pospuesto cinco veces debido a que no cuentan con los permisos necesarios para iniciar con la intervención. No obstante, la alcaldesa le echó la bolita a los empresarios al mencionar que ellos solicitaron que la remodelación iniciara hasta enero.
El gobierno estatal detalló que las obras no podían iniciar debido a que no habían tramitado los permisos ambientales para conocer el impacto que puede causar al medio ambiente dicha rehabilitación.
Situación de la que se deslindó el Ayuntamiento de Puebla al indicar que el trámite de estos permisos como los solicitados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia le correspondía a la empresa contratada para realizar las obras.
Centro Histórico luce desbordado por los ambulantes
El corredor de la 5 de Mayo se convirtió en un foco de infección debido a la instalación de al menos mil 400 informales únicamente en esta zona, quienes no respetan la sana distancia ni usan adecuadamente el cubrebocas, lo que afectó la reactivación económica para el comercio establecido.
En repetidas ocasiones, el Ayuntamiento ha mostrado su omisión ante el tema del ambulantaje debido a su política de “no confrontación” e incluso la alcaldesa negó tener reportes de informales instalados en la 8, 10 y 12 Poniente, así como en la 5 de Mayo hasta la 4 Poniente.
Pese a la incapacidad de poner orden en la zona, Claudia Rivera advirtió que no removería de su cargo a René Sánchez Galindo, titular de la Secretaría de Gobernación Municipal, quien argumentó en repetidas ocasiones que el ambulantaje no es comercio informal.
Puebla de los baches, Claudia acusa que no le corresponden
Tras la temporada de lluvias, la capital del estado lució llena de baches, sin embargo, la presidenta municipal acusó que era un problema que habían heredado de las administraciones pasadas.
Al ser cuestionada sobre el exceso de hoyos, Rivera Vivanco se limitó a responder que a ella no le corresponde hablar del tema y es algo que únicamente le compete a la Secretaría de Infraestructura.
Claudia Rivera convierte en un show mediático sus comparecencias
La alcaldesa fue llamada a comparecer ante la Comisión Inspectora del Congreso del Estado en dos ocasiones por irregularidades en su mandato y, en ambas, aprovechó para volverlas un show mediatico y llevó acarreados para apoyarla.
La primera fue el 5 de octubre cuando acudió a la sede de la Auditoría Superior del Estado, donde solo entregó un documento de 20 hojas y no quiso responder las preguntas que le harían los diputados, al llegar al edificio del Poder Legislativo, trabajadores del Ayuntamiento ya la esperaban para apoyarla entre gritos y al entregar su documento se compró un molote.
La alcaldesa fue citada por segunda ocasión el 10 de diciembre, pero mandó a tres funcionarios en su lugar: la secretaria general del Ayuntamiento de Puebla acusó que el citatorio atentaba contra los derechos de Claudia Rivera y argumentó que es persecución política.
Claudia Rivera aprovecha toma de Congreso del Estado para buscar reelección
El pasado 24 de noviembre a las 4 de la tarde colectivas feministas tomaron el Congreso del Estado y la alcaldesa no tardó en “sumarse” a la causa y acudió a mostrar su apoyo a las manifestantes.
Sin embargo, la alcaldesa únicamente acudió a tomarse fotografías para presumir en sus redes sociales el apoyo al movimiento social para después retirarse del lugar, ya que justificó, no la dejaron entrar al inmueble.
Rivera Vivanco aprovechó la situación para politizar la despenalización del aborto y mostrar su confrontación con el diputado Gabriel Biestro Medinilla.
