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El secretario de Gobernación municipal, René Sánchez Galindo admitió que el ambulantaje se desbordó durante las fiestas navideñas y una vez más los defendió al presumir que por un día obedecieron las órdenes de la autoridad estatal y no se instalaron en el Día Solidario.
En rueda de prensa, el titular de la Segom, justificó que los ambulantes han respetado las reglas sanitarias como guardar 2.5 metros de distancia entre cada puesto para controlar los contagios de COVID-19 en el Centro Histórico.
“Se ha mantenido la sana distancia en la 8 y 10 Poniente en las que se colocaron puestos de 2.5 metros, además se colocaron cinco lonas en el Centro Histórico para inhibir aglomeraciones y se hicieron 83 exhortos afuera de los establecimientos mercantiles porque se registraron largas filas de personas esperando para ingresar a los negocios”.
Sin embargo, aceptó que el número de ambulantes incrementó en los últimos días al pasar de 700 a 850 puestos en la 5 de Mayo, 8, 10 y 14 Poniente, e incluso aceptó que algunos exceden las vallas colocadas para su instalación y afectan al tránsito peatonal.
Por otra parte, Sánchez Galindo acusó que el pasado 25 de diciembre, los comerciantes establecidos no respetaron las indicaciones del gobernador Miguel Barbosa Huerta de unirse al Día Solidario y no dar servicio, ya que alegó, abrieron sus puertas y causaron aglomeraciones afuera de las tiendas.
