Osvaldo Macuil / @OsvaldoMacuil
La alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco y el secretario de Administración, Leobardo Rodríguez reconocieron que la empresa Fulle Hen los timó en la compra de los ventiladores para enfermos de coronavirus, pues se acordó que los equipos serían nuevos y al final llegaron usados y reconstruidos.
Por ello, han rescindido el contrato y desde la Sindicatura Municipal se iniciarán las investigaciones correspondientes para determinar si es necesario presentar una denuncia penal en contra de la firma.
En rueda de prensa, Claudia Rivera dijo que se le dio la confianza a la empresa como ocurre en todas las compras que realiza el Ayuntamiento poblano.
Pese a que los ventiladores fueron entregados en el Hospital de Traumatología y Ortopedia, dijo que su administración no erogó un solo peso debido a que no se cumplieron las características de lo establecido en el contrato.
Insistió en que fue un acto de buena fe y su gobierno ha sido linchado por esta situación.
Ventiladores costaban un millón 100 mil pesos
El secretario de Administración, Leobardo Juárez detalló que la empresa contratada cumplió con las especificaciones, a pesar de que tenia seis meses de iniciar operaciones y estaba especializada en el sector de la construcción.
Sostuvo que no es una empresa fantasma pues tiene sus oficinas en la Ciudad de México y ha trabajado con algunas instituciones de salud.
El funcionario municipal dijo que las propuestas que recibieron sobre el precio de los ventiladores oscilaban entre un millón 100 mil y más de 3 millones de pesos. Pero al final se quedaron con la propuesta más baja.
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