El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta detalló que habrá inspecciones constantes en la planta Bonafont para garantizar que no haya afectaciones a los mantos acuíferos.
En rueda de prensa, advirtió que en caso de que encuentren anomalías, cancelarán definitivamente la operación de esta empresa instalada en Juan C. Bonilla.
Expuso que la reactivación de esta empresa permitirá que 600 familias tengan asegurado su salario normal.
Por ello, insistió en que los directivos de la empresa deben tener diálogo con los pobladores, pues de este modo se tendrá una convivencia sana en la región.
“Van a aceptar cualquier revisión y vigilancia de la explotación de los pozos que tienen ahí y si hay alguna irregularidad que se cancele”.
La semana pasada, un juez ordenó que Bonafont volviera a operar, por lo que elementos policíacos y de la Guardia Nacional retiraron a manifestantes que llevaban casi un año en las instalaciones.
Posteriormente, los pobladores presentaron una queja ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para que se revise el caso.