Osvaldo Macuil / @OsvaldoMacuil
La alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco compareció a medias ante la Comisión Inspectora del Congreso Local, pues acudió a entregar un informe por escrito, dio un posicionamiento de 10 minutos, y posteriormente se fue de la sesión, sin recibir preguntas de los diputados locales.
La semana pasada, los legisladores la citaron luego de que recibieron denuncias ciudadanas en torno a supuestas irregularidades cometidas por su administración.
A pesar de que dijo que no acudiría, Claudia Rivera llegó antes de las 10 de la mañana a la sede de la Auditoria Superior del Estado, en donde se desarrollaría la sesión de la Comisión Inspectora.
La presidenta de este órgano legislativo, Olga Romero Garci Crespo le expuso que la denuncia ciudadana incluye el proyecto de remodelación del Centro Histórico, la compra de juguetes para el Día del Niño, barrido mecánico, servicio de fletes y los programas relacionados con el COVID-19 como la entrega de despensas y kits médicos.
La presidenta municipal entregó un informe por escrito de los temas que le solicitaron y fijó una postura.
Sostuvo que los diputados locales se extralimitaron al llamarla a comparecer, pero acudió para abonar a la transparencia y rendición de cuentas.
Insistió en que hay una persecución política en su contra y están usando las instituciones públicas como garrote político.
“Somos el Ayuntamiento más vigilado con auditorias en curso, hay auditorias preventivas en tiempo real, programas que aún sin ejecutarse ya se encuentran auditados”.
Agregó que seguirá defendiendo la autonomía municipal y presumió que la capital es primer lugar nacional en transparencia.