La exalcaldesa Claudia Rivera Vivanco reconoció que su administración heredó el desbordamiento de ambulantes en el Centro Histórico de Puebla de gobiernos anteriores, sin embargo, no hizo nada para disminuir o denunciar el problema.
Señaló que el comercio informal es un conflicto histórico que ha afectado a Puebla desde gestiones anteriores a la suya, las cuales acusó, permitieron la venta de productos ilegales como piratería, objetos robados y sustancias nocivas.
No obstante, en su función como alcaldesa, tampoco interpuso denuncias en contra de estas organizaciones, incluso, permitió que aumentara de manera considerable el número de ambulantes en el primer cuadro de la ciudad.
«Esto ha sido histórico, anteriormente partidos políticos utilizaban a ambulantes como grupos de choque, eso me tocó recibir en 2018, una práctica sistemática que nunca había sido denunciada para investigar casos con apariencia de delito».
El 28 de febrero, el Ayuntamiento de Puebla en coordinación con el Gobierno del Estado, implementaron el Operativo C-10, para retirar a los ambulantes del Centro Histórico.
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