Osvaldo Valencia / @Osva_Valencia
Consejeros estatales de Morena que impusieron como delegado en funciones de presidente a Mario Bracamonte González, reprocharon al dirigente Edgar Garmendia De los Santos por excluir al Consejo Estatal del partido en la mesa de análisis y negociación del proceso electoral local.
En videoconferencia de prensa, los consejeros minimizaron la amenaza del Comité Ejecutivo Estatal sobre las denuncias que presentarán ante la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia.
Julián Pérez Tapia, quien fungió como presidente del Consejo Estatal en la sesión extraordinaria del pasado 24 de enero, señaló que de acuerdo con el artículo 14 del Estatuto del partido, están facultados para llevar el orden de su partido.
Señalaron que la sesión del consejo fue legal debido a que contaron con el quórum legal y fue asistida por la presencia de un notario público.
Asimismo, confiaron en que no habrá sanción por parte de los órganos internos del partido, pues aseguraron que Morena “no es igual al PRI” que emite castigos a sus militantes.
Sobre el presunto desvío de 11 millones de pesos por parte de Mario Bracamonte en su periodo como delegado presidente, los consejeros rechazaron el señalamiento al indicar que el partido ha cumplido con sus obligaciones de transparencia.
El pasado 25 de enero, el Comité Ejecutivo Estatal advirtió que presentará denuncias por la sesión extraordinaria del Consejo Estatal por exceder sus atribuciones, y pidieron a Mario Bracamonte concluir el proceso de entrega-recepción del comité, pues no se han devuelto camionetas y equipo de cómputo.