Osvaldo Macuil / @OsvaldoMacuil
Puebla es una de las ciudades más religiosas de México. Las cifras oficiales refieren que la Angelópolis tiene 288 iglesias. El turismo religioso genera grandes ingresos y por ello Semana Santa es una de sus fechas más importantes.
La Catedral, el Señor de las Maravillas y la Capilla de Dolores son los tres templos católicos más visitados en la ciudad.
Desde 1992 se instauró la Procesión de Viernes Santo y hasta el año pasado se había realizado 28 veces consecutivas. Este año, la contingencia sanitaria a consecuencia del coronavirus evitó que se realizará.
Este año se esperaba que acudieran 150 mil personas a la celebración religiosa más importante de Puebla.
Por las calles de Puebla, desfilan imágenes religiosas como el Señor de las Maravillas, la Virgen de los Dolores, Virgen de la Soledad, el Señor de las Tres Caídas y Jesús de Nazareno.
El crecimiento del coronavirus provocó que la Semana Santa se suspendiera. Todos los actos religiosos fueron a puerta cerrada y no hubo conglomeraciones como tradicionalmente se acostumbra.
El Jueves Santo estuvo abierto el Señor de las Maravillas y los católicos que no respetan el “quédate en tu casa” acudieron sin importarles las restricciones. Por la tarde ordenaron el cierre del templo ubicado en la 5 de Mayo.
Sin embargo, el resto de los templos lucieron cerrados, ya que Puebla tuvo que sacrificar la Semana Santa antes de que aumenten los casos de coronavirus que al corte de este 10 de abril van 227 casos confirmados y 24 defunciones.