Osvaldo Valencia / @Osva_Valencia
Con un panorama político completamente distinto en comparación al 2018, y una situación social adversa por la pandemia del coronavirus, Claudia Rivera Vivanco y Eduardo Rivera Pérez tendrán su segundo enfrentamiento por la presidencia municipal de Puebla.
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Tras una intensa disputa a nivel local para obtener sus respectivas candidaturas, las dirigencias nacionales de los partidos Acción Nacional (PAN) y del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) confirmaron la postulación del ex edil y la alcaldesa que busca la reelección por un trienio más.
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El panista enfrentará su tercera elección por la presidencia municipal, segunda de forma consecutiva, con nuevos aliados, pues ahora su candidatura es respaldada por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), mientras que el Partido de la Revolución Democrática (PRD) aún está en pláticas por falta de espacios en su planilla de regidores.
La morenista, por su parte, solamente será respaldada por el Partido del Trabajo (PT) pues su antiguo aliado, Partido Encuentro Social (PES) perdió el registro como partido político nacional, mientras que el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), aliado de Morena a nivel nacional, postulará a su propio candidato.
Además de estos elementos, el estado atraviesa una nueva etapa política, pues con la muerte de la gobernadora Martha Erika Alonso Hidalgo y el senador Rafael Moreno Valle, el morenovallismo dejó el poder, y la gubernatura la ganó el morenista Miguel Barbosa Huerta, quien inició investigaciones en contra de la clase política que controló al estado durante 10 años.
En el primer round, Claudia Rivera ganó con la ola obradorista En la elección de 2018, Claudia Rivera Vivanco, quien era secretaria de Diversidad Sexual, fue designada como candidata tras una encuesta realizada al interior del partido, en la que se midieron a cinco mujeres. Su único antecedente era haber laborado en el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Por su parte, Eduardo Rivera logró la candidatura tras alcanzar un acuerdo con la dirigencia estatal y nacional del PAN para acompañar a Martha Erika Alonso Hidalgo en su candidatura a la gubernatura.
Los partidos que apoyarían sus candidaturas fueron PRD y Movimiento Ciudadano, aunque a el ex alcalde poblano no lo respaldó Compromiso Por Puebla (CPP) y Pacto Social de Integración (PSI).
Además de ellos, el PRI postuló a Guillermo Deloya, PSI a Víctor Gabriel Chedraui, PVEM a Paola Migoya Velázquez, CPP a Gonzalo Juárez Méndez, y Nueva Alianza a Ernestina García Chávez.
El 1 de julio de 2018, la ola obradorista se hizo presente en todo el país, con el triunfo de Andrés Manuel López Obrador, cientos de candidatos de Morena-PT-PES se vieron beneficiados en las urnas.
Claudia Rivera obtuvo una votación de 343 mil 98 votos; mientras que Eduardo Rivera solo alcanzó 253 mil 384, con lo que se concretó así el primer triunfo de un partido de izquierda por la presidencia municipal de Puebla.
Esta vez, los mismos candidatos de Morena y PAN se verán las caras, con diferentes aliados y en medio de una pandemia que comenzó en México en febrero de 2020, y que no ha sido controlada.
