Quedé
Este martes, el parlamento de Hungría aprobó una ley que prohíbe hablar sobre la homosexualidad en las escuelas, lo que ha provocado una lluvia de críticas por parte de organizaciones de derechos humanos y colectivos LGTBI.
El proyecto impulsado por el partido de Viktor Orbán, se enfoca contra la pedofilia, sin embargo, incluye artículos que vinculan directamente la homosexualidad con el abuso a menores.
Este proyecto que logró el respaldo de 157 parlamentarios, prohíbe expresamente las charlas sobre homosexualidad en centros educativos.
Asimismo, censura cualquier tipo de material audiovisual y escrito relacionado con el colectivo LGBTIQ+ en las aulas de clases, con la finalidad de «proteger los derechos de los niños».
Esta ley también incluye a empresas y grandes organizaciones, pues les prohíbe publicar anuncios a favor de las personas LGBTIQ+, si estos se consideran dirigidos a menores de edad.
«La pornografía y los contenidos que representen la sexualidad o promuevan la desviación de la identidad de género, el cambio de sexo o la homosexualidad no deben ser accesibles a menores de 18 años».