Ante el sorpresivo y lamentable deceso de Miguel Barbosa Huerta, Puebla requería estabilidad política de manera inmediata, pues muchos oportunistas políticos ya se frotaban las manos para poner a uno de los suyos y allanarse el camino de cara a la elección de 2024.
El barbosismo eligió a uno de los suyos, quien ya estaba al frente de buena parte de la estructura política en Morena: Sergio Salomón Céspedes Peregrina.
Después de ello se trató de poner en duda la legalidad de la designación del ex presidente del Congreso de Puebla. Sin embargo, fueron irrisorios los argumentos legales para intentar tirar el nombramiento.
A lo largo del mes, el político oriundo de Tepeaca ha sido más que legitimado en el cargo. La misma semana en el que asumió el cargo fue recibido por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador en una reunión con todos los gobernadores de Morena.
Ese encuentro se celebró el 19 de diciembre y también fue recibido en privado por la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Sergio Céspedes ha callado a sus críticos con trabajo y con una intensa agenda diaria que incluye actividades en la capital y giras al interior del estado.
Un punto a resaltar fue la reunión con el sector empresarial con el que se busca tener una reconciliación.
También se envió el mensaje de que el combate contra la corrupción continúa y prueba de ello fue la detención de Rodolfo Chávez, el ex director de Carreteras de Cuota que cometió anomalías en el gobierno barbosista y pensó que ante la muerte del gobernador podía volver a Puebla.
Algunos vaticinaron que era el fin del grupo que encabezó Miguel Barbosa y que ante la llegada del nuevo gobernador cortaría cabezas del gabinete.
En la práctica ocurrió todo lo contrario. Se nombró a Julio Huerta como secretario de Gobernación, quien en la práctica ya lo hacía. El mensaje fue contundente y el barbosismo se ha mantenido más unido que nunca.
El único personaje que se sumó a la burbuja del gobernador fue Javier Aquino Limón, la mano derecha del gobernador poblano.
Sergio Céspedes ya se reunió con la maquinaria política confirmada por Morena, PT y el Verde Ecologista, la cual sigue funcionando como lo diseñó Miguel Barbosa.
Los secretarios entendieron el rol que debían jugar y aunque aún se mantienen las aspiraciones rumbo al 2024, han dejado de lado la promoción personal para apoyar al gobernador.
La continuidad en el gobierno estatal se dio sin sobresaltos y se ha mantenido la gobernabilidad con el sello combinado del barbosismo con el cespedismo.
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