Grillas, egos y jalones en la bancada poblana de Morena en la Cámara de Diputados
Uno de los principales problemas con los que tendrá que lidiar el gobernador electo Alejandro Armenta durante los primeros tres años de su sexenio al frente del Ejecutivo local será la guerra de egos que ya se empieza a ver entre los candidatos que ganaron en la elección del 2 de junio.
Y es que, la aplastante victoria en los pasados comicios nubló el juicio de muchos de las y los exabanderados, quienes sin mover un solo dedo, gastar suela o recursos propios esperaron que el impulso de Claudia Sheinbaum y el arrastre de Alejandro Armenta les entregasen una alcaldía, una senaduría o una diputación local o federal.
Ejemplos de estos oportunistas sobran y en el escritorio del futuro mandatario poblano ya se tiene la radiografía de quiénes sí y quiénes no hicieron campaña, cumplieron con sus cuotas de votos y aportar algo más que problemas durante el proceso electoral que pintó todo el estado con los colores del Movimiento Regeneración Nacional.
La borrachera del poder aún tiene mareados a más de uno y una, que se presumen como los candidatos más votados a pesar de que su trabajo fue inexistente y que solo fueron consecuencias de la “Marea Guinda” que azotó a la entidad poblana el primer domingo de junio.
La soberbia siempre será una mala consejera y eso no lo han entendido un par de diputados federales electos que representaron al PT y al Verde Ecologista en sendos distritos de la capital, quienes todavía no rinden protesta en el Pleno de San Lázaro y ya están pensando en el siguiente cargo al que buscan brincar.
Este par de personajes mareados en su ladrillo ya le aseguraron a sus cercanos que solo estarán en sus curules por un año para aventurarse a buscar la candidatura a la alcaldía de Puebla en las elecciones del 2027.
Sobra decir que esto es un gran despropósito en contra de Alejandro Armenta y de Pepe Chedraui, quienes demostraron el 2 de junio que ellos serán los dos principales referentes de la 4T en el estado y en la capital, respectivamente.
Las grillas y la falta de oficio político entre la bancada poblana cuatroteista en la Cámara de Diputados no se limita únicamente a los ‘chapulines’ anticipados, también abarca a los futuros legisladores que buscan sacar jugosos dividendos y negocios con las partidas especiales asignadas para los coordinadores y subcoordinadores parlamentarios de los diferentes grupos legislativos.
Un acuerdo al que llegaron los 16 diputados federales de Morena, PT y PVEM con el gobernador Sergio Salomón Céspedes y con su futuro sucesor Alejandro Armenta en la reunión que sostuvieron la semana pasada en uno de los anexos del CIS fue la de ungir a Juan Antonio González, del Distrito 4, de Libres, como el coordinador de la fracción poblana en San Lázaro.
En esta encerrona en el inmueble que alberga la oficina principal del Ejecutivo poblano también se pactó de manera unánime apoyar a Ricardo Monreal como el coordinador parlamentario de Morena en la LXVI Legislatura que rendirá protesta el próximo 15 de septiembre.
De hecho, este acuerdo fue avalado por los 16 legisladores poblano y no fue, como se filtró de manera dolosa en medios por uno de ellos, una orden dictada por Céspedes Peregrina o Armenta Mier.
Entre la bancada poblana de diputados federales existe la sospecha que hay una “garganta profunda” que busca desestabilizar, como ya lo hicieron en la administración del fallecido Miguel Barbosa por ordenanzas de Ignacio Mier, al gobierno de Alejandro Armenta.
La mayoría de los y las diputados federales electos creen que el infiltrado es Alejandro Carvajal, quien no quedó contento con el nombramiento de Toño González como coordinador de la fracción poblana y que ahora busca venganza contra el armentismo y también hacerle el trabajo sucio a Nachito Mier.
Carvajal Hidalgo junto con Nachito Mier Jr. estarían conformando un grupo disidente entre los diputados federales de Puebla para favorecer al papá del segundo, en su sueño de opio de ser candidato –ahora sí– el candidato de Morena en el 20230, entre los que figurarían Tony Gali López, Claudia Rivera Vivanco y Karina Pérez Popoca, quienes en el proceso interno morenista se la jugaron con el aun líder de la fracción morenista en San Lázaro.
Hay que recordar que Mier Velazco fue el gran ausente de la reunión antes mencionada que los legisladores federales electos sostuvieron con Sergio Salomón y Alejandro Armenta.
Un dato que no puede pasar desapercibido es que con la designación de Ricardo Monreal como el coordinador de la bancada de Morena en la Cámara baja, el cual se dio durante la reunión que Claudia Sheinbaum encabezó en la CDMX este martes llamada como la Asamblea de Constituyentes del Segundo Piso de la 4T, el gobernador electo Alejandro Armenta se fortalece a nivel nacional al ser uno de los políticos más cercanos al zacatecano.
Es decir, Armenta podrá cuadrar cuándo así lo desee a la bancada de diputados federales poblanos o dinamitar cualquier rebelión, grillas o frenar a los adelantados.
Las grillas en el inicio de la era armentista están a la orden del día.
El ego inmenso de algunos ya es bastante incómodo.
El poder no se comparte y “uno solo hay uno”.
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