La pandemia ha significado un punto de inflexión en muchas vidas, y también en la comunicación política. Nuevas plataformas de streaming han revolucionado el mercado, dando acceso a una gran diversidad de contenidos. El sector político se ha tenido que adaptar a las redes sociales, generando un ecosistema comunicativo donde priman los mensajes cortos cargados de emoción, como evidencian los tweets de varios funcionarios políticos alrededor del mundo.
Twitch es una de esas plataformas nuevas que marcan un hito importante para transmisiones en vivo. Los usuarios no solo ven videos de su interés, sino también pueden interactuar fácilmente con otros usuarios.
En este sentido, la plataforma de Amazon se ha convertido en un escenario de interacción en el que cada vez más los creadores de contenido expresan sus opiniones políticas, influyendo en las generaciones más jóvenes.
Según el informe ‘Twitch Revenue and Usage Statistics (2022)’, el 73% de la audiencia de Twitch son usuarios de entre 16 y 34 años de edad, porcentaje que pone de manifiesto la importancia de los creadores de contenido como líderes de opinión entre los más jóvenes. Esto, sumado a la constante exploración de nuevos contenidos y experiencias, hace que las retransmisiones cada vez estén menos vinculadas a los videojuegos y surjan temas de conversación más variados, como la política o la economía.
Los creadores de contenido se han convertido en ídolos para una comunidad muy fidelizada que se identifica fácilmente con los mensajes que transmiten. Por ello, Twitch debería ser la herramienta idónea para explicar a los jóvenes cómo la política les va a incidir en sus vidas, quieran o no quieran, estén interesados o no, pero siempre desde la reflexión, no la imposición.
El auge de la plataforma hasta el momento estaba monopolizada por influencers y aficionados a los videojuegos. No obstante, fruto del éxito cosechado en los últimos años, políticos y partidos se están abriendo espacio a través del novedoso formato que ofrece este portal.
La llegada de la comunicación de masas al streaming no es algo nuevo, pero este canal supone un punto de inflexión. Por ejemplo, el primer caso de comunicación política fue la retransmisión de una partida del popular juego Among Us por parte de la congresista estadounidense Alexandria Ocasio-Cortez, en la que consiguió llegar al medio millón de visitas.
La estrategia fue clara: generar impacto en la población joven, poco politizada, que rara vez consume programas políticos o noticias políticas para conseguir un mayor número de votantes para Joe Biden, lo que fue un éxito rotundo.
Los políticos se están adaptando los nuevos medios de comunicación, donde tienen un peso mayor las plataformas de streaming. Su intención es que un público más joven capte su mensaje. El político tiene que establecer comunicación directa con el joven mediante algún interés en común, como los videojuegos. Generar esta conexión con el público es esencial para que el mensaje llegue a la mayor cantidad de personas.
Ahora bien, el político debe adoptar el lenguaje comunicativo a las necesidades de los usuarios de esta plataforma. El mensaje que el político transmite por Twitch debe ser natural, no forzado. Este se debe adaptar al público joven, predispuesto a escuchar contenido formativo que sea llamativo y de impacto emocional. Y, sobre todo, que sea de utilidad para la ciudadanía, no para sí mismo.
¿Ustedes incorporarían esta estrategia?
Si desean conocer más sobre este y otros temas, pueden escribirme a luisgarcia.rupercalia@gmail.com ¡Hasta la próxima!