Día de la Virgen del Carmen: Por qué se celebra el 16 de julio

Cada 16 de julio, los fieles católicos celebran el Día de la Virgen del Carmen, en diversas partes del mundo y aquí te contamos la historia.
La veneración de la Virgen del Carmen se remonta a 1251, aunque su culto tiene raíces más antiguas, ya que un siglo antes, un grupo de eremitas eligió el monte Carmelo para llevar una vida de penitencia. Estos ermitaños interpretaron que la nube vista por el profeta Elías (1 Reyes 18,44) simbolizaba a la Inmaculada Virgen María.
Estos ermitaños dieron origen a la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo, reconocida oficialmente en 1209. Aunque fueron expulsados del monte Carmelo por los sarracenos, su dispersión por Europa les permitió promover su estilo de vida basado en la soledad, el ayuno y la oración.

Para 1246, la situación de la orden no era favorable, y su futuro parecía incierto. Fue entonces cuando San Simón Stock, nombrado general de la orden ese mismo año, oró pidiendo la intervención de la Virgen para obtener su amparo.
La respuesta llegó el 16 de julio de 1251, cuando la Virgen del Carmen se apareció a San Simón Stock y le entregó el escapulario, prometiendo que quien muriera llevándolo consigo no sufriría el fuego eterno.
Inicialmente, el escapulario fue dado a los monjes, pero con el tiempo, la Iglesia extendió su privilegio a los laicos. El escapulario simboliza el amor y la protección maternal de María, la pertenencia a María y el suave yugo de Cristo.
No debe ser visto como un amuleto ni una excusa para no cumplir con los mandamientos de la vida cristiana, sino como un recordatorio del compromiso adquirido. Es similar a un rosario, ayudando a los fieles a perseverar en la fe y a acudir a la oración. La promesa de la Virgen se entiende como el don de la perseverancia en el estado de gracia o el arrepentimiento.
Te recomendamos:
Foto: Gran Angular Agencia / @AngularAgencia
Últimas noticias de México
