Tras meses de espera, Guadalupe Pérez Solano tendrá su audiencia intermedia para poder recuperar a su hija, tras denunciar penalmente a su ex pareja por sustracción de menores, en Puebla.
Mientras que la juez del Primero de lo Familiar falló en su contra al solo otorgarle una hora de videoconferencia con su hija y desestimar la carpeta de investigación por la sustracción de menores, «Lupita» continúa sufriendo de violencia vicaria.
Todo inicio en 2014 cuando por diferencias y constantes problemas decidió separarse de su pareja.
A pesar de no recibir «ni un quinto» para la manutención de la menor, Guadalupe permitía la convivencia de su hija con su padre, quien un día se la llevó.
Desde entonces Lupita ha sufrido de violencia vicaria por no poder acercarse a su hija, incluso tuvo que acceder a tomar terapias para convivir con ella, sin embargo, su padre la mantiene alejada de ella.
Pérez Solano decidió denunciarlo via penal donde logró que fuera vinculado a proceso; sin embargo, continúa en libertad.
Lupita acusó varias trabas en el sistema que no le han ayudado a recuperar a su hija y espera que una vez que se logre una sentencia a su favor por la vía penal, el juzgado familiar le otorgue la guardia y custodia de la pequeña.
Cabe resaltar que la diputada panista Aurora Sierra busca desde el Congreso que la violencia vicaria, ejercida por cónyuges o ex parejas sentimentales, sea tipificada en el estado.
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