El gobernador Miguel Barbosa Huerta confrontó a los funcionarios de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), por las obras que intentaron hacer en la ciudad de Puebla durante la gestión de Claudia Rivera Vivanco, al señalar que tenían tintes electorales.
Durante la primera Comisión de Ordenamiento Metropolitano que se llevó a cabo entre los gobiernos de Tlaxcala y Puebla junto con la dependencia federal, Barbosa Huerta aprovechó para mostrar su inconformidad con las obras que quedaron pendientes.
Comentó que durante los casi tres años que ha estado al frente del Poder Ejecutivo estatal, no ha tenido buena relación con la SEDATU, pues en ocasiones, no han tomado en cuenta su opinión para entregar obras a los municipios.
«No he tenido la mejor relación con al SEDATU, porque vinieron a hacer obras electorales a Puebla que nunca terminaron y eso por hacer caprichos no lo hagan, planeen y a ejecutar las cosas para beneficio de todos se los digo con mucho respeto».
Tal es el caso de la remodelación del Mercado de Amalucan y la intervención del Zócalo de la ciudad, pues una de ellas no se llevó a cabo y la otra solo se hizo parcialmente.
Barbosa Huerta mencionó que estas obras son fruto de caprichos que no fueron planeados y no estaban establecidos los beneficios que tendrían para la ciudadanía.
El mandatario estatal aseguró que la intención de estas intervenciones era hacer obras electorales para beneficiar a solo unos cuantos.
En octubre, la SEDATU presumió la intervención del Zócalo de Puebla con luces en la Fuente de San Miguel, la cual llevó en conjunto con la administración municipal anterior.
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