Este 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional de la Bisexualidad, una fecha destinada a rechazar la discriminación y promover el respeto hacia las personas independientemente de sus orientaciones sexuales.
Esta celebración, que forma parte de la comunidad LGBT+, busca visibilizar y apoyar a quienes se identifican como bisexuales, así como a todos los colectivos que no están representados en las siglas iniciales, añadiendo el símbolo +.

El origen de esta festividad se remonta a 1999, cuando fue decretada y proclamada durante la conferencia anual de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA) en Johannesburgo, Sudáfrica.
Surgió como respuesta a la bifobia, los prejuicios y la marginación que a menudo enfrentan las personas bisexuales, tanto dentro de la comunidad LGBT+ como por parte de individuos heterosexuales.
La bandera bisexual, diseñada por Michael Page en 1998, es uno de los símbolos más reconocibles de esta orientación sexual.
Consta de tres franjas de colores distintos: rosa, azul y morado. Según «Cosmopolitan», cada tonalidad tiene un significado específico.

El rosa representa la atracción hacia personas del mismo sexo, el azul simboliza la atracción hacia personas del sexo opuesto, y el morado representa la atracción hacia personas de ambos sexos.
Esta celebración no solo busca celebrar la diversidad, sino también concienciar sobre la importancia del respeto y la aceptación, promoviendo un entorno inclusivo y libre de prejuicios para todas las personas, independientemente de su orientación sexual.