Un fuerte terremoto submarino sacudió el sur de Filipinas este viernes, provocando la caída de techos en centros comerciales y sembrando el pánico entre los compradores locales. A pesar de la magnitud del temblor, las autoridades no han activado la alerta de tsunami.
La Oficina de Defensa Civil confirmó que investiga un reporte sobre una posible víctima mortal a causa del sismo.
El terremoto, de magnitud 6.7, tuvo su epicentro a 26 kilómetros de la localidad de Burias, en el extremo sur de Filipinas, según el Servicio Geológico de Estados Unidos. Su profundidad fue registrada a 78 kilómetros bajo la superficie terrestre.
Impactantes videos compartidos en redes sociales mostraron cómo los techos de dos grandes centros comerciales colapsaban mientras los pilares se sacudían y la gente se llenaba de temor, lanzando gritos de alarma.
El centro comercial SM City General Santos y el centro comercial Robinsons GenSan anunciaron cierres temporales tras el incidente, aunque no se han reportado heridos en ninguno de los dos lugares.
El palacio presidencial informó que el presidente Ferdinand Marcos Jr. dio instrucciones a las agencias gubernamentales para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los afectados por el sismo, destacando la importancia de una respuesta rápida y efectiva en situaciones de emergencia como esta.
Filipinas, ubicada en el conocido «Cinturón de Fuego» del Pacífico, es propensa a terremotos y erupciones volcánicas debido a su posición geográfica.
Este cinturón, también llamado el «Anillo de Fuego», es una zona de alta actividad sísmica y volcánica en todo el mundo. Rodea varias placas tectónicas, incluida la Placa del Pacífico, así como placas más pequeñas como las de Filipinas, Juan de Fuca, Cocos y Nazca. Muchos de los sismos y actividad volcánica recientes en la región están relacionados con esta característica geológica.
Raúl Valenzuela Wong, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM, explicó que la actividad sísmica en esta zona es normal y está relacionada con la evolución tectónica de la Tierra, subrayando la importancia de comprender los fenómenos naturales y estar preparados para enfrentarlos en una región tan propensa como Filipinas.
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