Impuestos condonados y créditos fiscales, la bomba que explotó en Huejotzingo

La bomba que explotó en Huejotzingo. Roberto Solís Valles no llevaba ni un año como alcalde y ya enfrenta un grave problema económico que le heredó la anterior administración encabezada por Angelica Alvarado, actual diputada local.
En la revisión de los estados financieros se detectaron condonaciones de impuestos por más de 5 millones de pesos. Curiosamente, los beneficiarios son familiares, amigos y gente muy cercana a la anterior administración municipal.
Roberto Solís no terminaba de explicar este caso, cuando el Servicio de Administración Tributaria le notificó que debido a un crédito fiscal que arrastra el organismo operador de agua, ahora se encargarán de cobrar el servicio para recuperar el pasivo.
La condonación de impuestos millonaria en Huejotzingo
El monto exacto es escandaloso: 5 millones 57 mil 103 pesoss. Y el destino de esa “generosidad” no fue una política pública para ayudar a sectores vulnerables. No. Fue para familiares, amigos y afines al gobierno municipal.
Esto no solo representa un agravio moral. Es un daño directo a la hacienda pública. Son recursos que pudieron invertirse en patrullas, médicos, drenaje o becas, que al final beneficiaron a unas cuantas familias.
Condonar impuestos de esta forma, sin criterios claros ni justificación técnica, no es eficiencia administrativa: es corrupción. Y debe investigarse por parte de la Auditoria Superior del Estado.

La bomba que explotó en Huejotzingo:El crédito fiscal ante el SAT
El alcalde Roberto Solís penas había salido a explicar este caso, cuando el SAT le tocó la puerta para informarle que iba a cobrar un crédito fiscal que arrastra el municipio desde el organismo operador de agua.
A la deuda de 28 millones de pesos que ya tenían se suma un crédito fiscal por 8.9 millones de pesos del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado de Huejotzingo (SOSAPAHUE).
Esta es una situación extrema, pues el organismo tributario puede embargar las cuentas y clausurar las operaciones, lo que pondría en jaque el suministro de agua.
Roberto Solís ya busca la fuente de ingresos para liquidar la deuda y evitar que al municipio le corten el suministro de agua.
Lo ocurrido en Huejotzingo no puede quedar como una anécdota más de impunidad local, pues es un ejemplo de los abusos que aún se cometen en los municipios, aprovechándose de que están lejos de reflectores estatales.