Columnistas

La nueva estrategia telefónica de Nacho Mier denota desesperación

Compártelo en tus Redes Sociales

Las llamadas telefónicas de los bancos o las compañías telefónicas para ofrecerte una tarjeta de crédito o un nuevo plan de datos, sin temor a equivocarme, es lo más molesto que existe para cualquier persona.

El acoso al que llegan las instituciones bancarias o de telefonía celular puede ser algo irritable y dudo que sean estrategias de marketing o de ventas exitosas, además de generar una animadversión por las empresas que marcan a horas no deseadas y hasta en fin de semana.

Tal parece que el equipo de precampaña de Ignacio Mier está conformado por sus peores enemigos.

¿Quién le vendió la idea al diputado federal que contratar a un call center para realizar cientos de llamadas a poblanos no afiliados a Morena era una buena idea para remontar en las encuestas que lo colocan ya como el cuarto lugar de los aspirantes que buscan abanderar al partido lopeozbradorista en los comicios sucesorios del próximo año?

¿Acaso Mier Velazco olvidó que esta misma estrategia de aire la empleó Claudia Rivera, candidata fallida a la presidencia municipal de Puebla, en la intermedia del 2021 y que fue uno de sus muchos errores que la llevaron a perder por doble digito contra el panista Eduardo Rivera?

Si las bardas y los espectaculares resultaron en un efecto boomerang para el exlíder estatal del PRI, las molestas llamadas del número +52 244 231 0997 también traerán efectos negativos para las aspiraciones del coordinador morenista en la Cámara de Diputados.

Lo único que Nacho Mier está demostrando con estas estrategias es una desesperación total ante su nulo crecimiento en las preferencias en la interna de Morena en Puebla.

A esto habrá que sumar la desafortunada declaración que el legislador hizo el pasado viernes frente al auditorio del Canal 6 en la que aseguró que ya cuenta con encuestas –las cuales nunca fueron mostradas– en la que ya encabeza la carrera por la candidatura del partido marrón en la entidad.

“Te puedo decir que ya vamos arriba (de las encuestas). Lo puedo decir con toda honestidad, mirándote a los ojos, vamos arriba, vamos a terminar de ver otros estudios, pero prácticamente todos ya nos ponen por encima (sic)”, soltó Mier ante la mirada atónita del periodista Alberto Rueda, quien se sentía incómodo en su silla tras las mentiras de su invitado a quien le pidió compartirle dichas encuestas que jamás aparecieron.

Y es que, a la fecha no existe una sola encuestadora, local o nacional, que ponga a Nacho como el primer lugar de los aspirantes de Morena que están peleando por la candidatura al gobierno de la entidad.

La inverosímil declaración de Mier a Canal 6 se da luego de la última muestra levantada en el estado por la encuestadora más conocida de México, Mitofsky, la cual puso a Mier Velazco como el cuarto lugar de la interna morenista por debajo de Alejandro Armenta, Claudia Rivera y Julio Huerta, quien es el verdadero caballo negro de esta carrera.

Durante algunas semanas al inicio de este año, Moisés Ignacio logró colocar en el colectivo poblano aquel mito genial que él era la ‘carta marcada’ de Palacio Nacional para convertirse en el candidato de Morena al gobierno del estado para las elecciones del 2024.

Junto con aquellas voces que aseguraban que Mier Velazco ya había recibido la bendición de Palacio Nacional también comenzó la estrategia ilegal de inundar la capital, la zona metropolitana y las principales cabeceras distritales de la entidad con 100 anuncios espectaculares y miles de bardas con su nombre.

Además, Nacho se dejó ver bastante bien acompañado por el poderoso Adán Augusto López, el aspirante presidencial y secretario ocasional federal de Gobernación, quien es su verdadero padrino político y único alfiler del que penden todas sus aspiraciones para representar las siglas y colores de Morena en la elección del primer domingo de junio del 2024.

Desde el inicio del segundo tercio de este año, Mier Velazco está perdiendo la guerra de las percepciones en la interna morenista. De hecho, las asambleas de su instituto ‘charro’ cuyo nombre es bastante complicado son cada vez más desangeladas y escazas de convocatorias.

Al expriista ya lo rebasaron por la izquierda Julio Huerta, Olivia Salomón y hasta Claudia Rivera, aunque suene inverosímil.

También, Nacho entiende a la perfección que Armenta, al fin, logró congraciarse un poco –aunque esto no implique que se le haya levantado el veto en Palacio Nacional– con el presidente Andrés Manuel López Obrador tras el rifirrafe con la ministra presidenta de la SCJN, Norma Piña.

Por esto es que Mier tuvo que recurrir al acoso telefónico y a colgar otra vez cientos de espectaculares en todo el estado.

El legislador sabe que se está rezagando en las encuestas y que su campaña de aire, a lo mucho y como muchos encuestadores serios lo conocen bien, apenas le puede dar entre 8 y 10 por ciento de conocimiento, que van de la mano con un incremento de negativos.

Nacho Mier tenía que seguir en la línea que le venía dando resultados, la cual se basaba en defender su cuento de ser el elegido de AMLO, y no caer en la desesperación de crecer en las encuestas.

¿Qué necesidad de caer en mentiras y en estas prácticas tan arcaicas y desesperadas?

Solo Nacho Mier lo sabe.

Más de «Historias de un joven reportero»: