Las autoridades de Corea del Sur detuvieron a una joven de 23 años, apasionada por programas de televisión y literatura sobre crímenes violentos, por su presunta participación en un asesinato atroz en la ciudad de Busan.
Según informes de los medios locales, la sospechosa habría matado, mutilado y abandonado el cuerpo de una mujer de aproximadamente 20 años a orillas del río Nakdong.
La Policía local reveló que la acusada inicialmente negó su implicación en el crimen, afirmando que se trataba de un accidente. Sin embargo, después de ser persuadida por sus familiares y los investigadores, finalmente admitió su autoría. Según su confesión, su obsesión por los medios de comunicación y los libros sobre casos de asesinato despertó su curiosidad por cometer un acto tan violento.
El crimen se describió como «casi perfecto» por las autoridades. De acuerdo con los informes, la joven conoció a su víctima a través de una aplicación de Internet en la que se ofrecen servicios de tutoría escolar.
Se hizo pasar por un padre que buscaba ayuda para las tareas de su hijo y logró concertar una cita con la profesora. Llegó a la casa de la víctima vistiendo un uniforme escolar y, una vez estuvieron solas, sacó un arma y disparó a la maestra, causándole la muerte instantánea.
Después de cometer el asesinato, la sospechosa se cambió de ropa y fue a una tienda para comprar bolsas de plástico y otros artículos. Luego mutiló el cuerpo de la víctima, colocó los restos en una maleta y tomó un taxi hacia el río, donde abandonó el cadáver.
El taxista, alarmado por el comportamiento extraño de la pasajera, informó a la Policía, lo que llevó a la ubicación y detención de la joven. En su posesión se encontraban la maleta, la billetera y la identificación de la víctima.
Las autoridades revelaron que el análisis forense del teléfono celular de la acusada reveló que había buscado información en Internet sobre cómo deshacerse de un cuerpo y cómo eliminar evidencias después de cometer un asesinato. Estas búsquedas indicaban que la joven había soñado con llevar a cabo el «crimen perfecto«.
Aunque no se han diagnosticado enfermedades mentales en la sospechosa y no tiene antecedentes penales, los expertos policiales opinan que su búsqueda de objetivos vulnerables en línea para satisfacer su deseo de dañar a las personas demuestra un fuerte temperamento psicópata. Además, advierten sobre la posibilidad de que pueda tener tendencias a convertirse en una asesina en serie.
Con información y foto de RT